El 29 de junio de 2009, la industria musical sufrió un revés con el final de Michael Jackson. El cantante falleció, pero su impacto es algo que sigue tomando forma incluso tras 15 años. Su legado perdura a través de sus éxitos atemporales y, en especial, en sus tres hijos: Paris, Blanket "Bigi" y Prince. Su adiós fue a raíz de una intoxicación por medicamentos, cuya mezcla fue mortal y desencadenó un paro cardíaco. Y aunque su influencia no se opacó con su partida, hoy en día hay grandes polémicas que rodean su legado. Se sabe con más claridad que su herencia no quedó libre de problemas, pues dejó una serie de deudas que a sus herederos les ha pesado todos estos años.
Cuando sufrió el paro cardíaco que puso fin a su existencia, Michael Jackson estaba preparando una gira de conciertos muy importante. Ya han pasado 15 años desde este suceso fulminante y aunque parezca inverosímil, sus familiares no han podido disfrutar del dinero de su fideicomiso. En el testamento se estipula que son sus hijos: Paris, Bigi y Prince; así como su madre, Katherine, los beneficiados. Aunque el legado de este dinero ha sido todo menos beneficioso.
La revista People obtuvo unos documentos donde se especifica que no se va a ceder el dinero a ninguno de los herederos hasta que se esclarezcan ciertos parámetros del patrimonio. "No pueden financiarse hasta que se resuelva una disputa en curso entre su patrimonio y el IRS, dicen los albaceas del patrimonio en un nuevo documento legal", decían los escritos. El caso es serio, hay muchas deudas implicadas.
Las deudas millonarias de Michael Jackson y las inexactitudes del valor de su patrimonio
Ciertamente, el "Rey del Pop" dejó un legado musical como ningún otro y fue uno de los artistas mejor pagados en la historia, algo que no terminó con su deceso. Con todo y eso, dejó un caos financiero, producto de tomar algunas decisiones inconscientes. Poco antes de morir, acumuló una deuda de 500 millones de dólares (465,70 millones de euros) por un estilo de vida descontrolado.
Entre otros gastos, la adquisición del Rancho Neverland que costó 17 millones de dólares (15,83 millones de euros) y 5 millones de dólares (4,65 millones de euros) anuales para su mantenimiento. También se hace referencia a 20 millones de dólares (18,62 millones de euros) para resolver temas judiciales que tienen que ver con abusos a menores, así como honorarios de profesionales y proyectos que no fueron rentables. A esto habría que añadir los préstamos millonarios que tramitó con Bank of America, de unos 380 millones de dólares (353,94 millones de euros) que podrían haberse usado para sufragar su elevado tren de vida y los gastos de su gira en ciernes.
El conflicto, entonces, no solo es por las deudas. Al mismo tiempo, hay un desacuerdo entre la testamentaría de Jackson y el IRS (el organismo de recaudación fiscal), no logran acordar a cuánto asciende su fortuna. Y aunque los herederos ganaron una batalla contra el IRS hace unos años, este lío no termina. A efectos fiscales, el valor de esta suma sigue siendo imprecisa y es que su catálogo musical es otro asunto que no tiene una cuantía real.
Michael Jackson, después de todo, era un genio musical, pero no el más brillante cuando se trataba de administrar bienes patrimoniales.