Después de un 19 de junio del 2022 glorioso que quedará para siempre en la memoria de los gerundenses, con sendos ascensos a la máxima categoría en fútbol y en baloncesto (el Girona de fútbol sube a Primera División consiguiéndolo, por fin, en una promoción de ascenso, y el de baloncesto a la Liga ACB después de 14 años), los dos equipos lo celebraron como es debido, con su afición y con los orgullosos habitantes de una ciudad que estos días es la capital del mundo, a nivel deportivo. Primero, con un desfile en autocar por las calles de la ciudad, después, con unos discursos desde el balcón del ayuntamiento en la popular Plaça del Vi y finalmente, en Montilivi y Fontajau. Fiesta grande la que se vivió durante toda la tarde-noche en una de las ciudades más bonitas del planeta. Nombres propios en esta celebración, hay muchos: Marc Gasol, Cristhian Stuani, etc. Pero sin duda, un nombre destacó por encima del resto: Miguel Ángel Sánchez Muñoz, más conocido como Míchel.
El entrenador madrileño del Girona ha robado el corazón a los gerundenses y a los catalanes. Primero, por su tarea deportiva en el banquillo gerundense, consiguiendo el soñado ascenso y ganando por fin una promoción. Pero también, porque desde el primer día se ha sentido un gerundense más, ha querido aprender nuestra lengua y nuestras costumbres, se ha sentido como en casa y no lo ha dudado ni un segundo al hablar en catalán en las ruedas de prensa, en las entrevistas o durante toda la celebración de ayer. El domingo en el césped del campo del Tenerife ya emocionó a todo el mundo recordando un dicho en catalán, "Girona, tres veces inmortal" delante de las cámaras de Movistar+. Y este lunes ha ido más allá en la Plaça del Vi y después en el campo del Girona. No nos extraña que los gerundenses lo aclamaran cuando llegó al grito de "Míchel catalán, Míchel catalán." Y él, eufórico y orgulloso de que le llamaran así.
Exultante a pie de calle y exultante cuando subió al balcón del ayuntamiento. Allí, micrófono en mano, volvió a demostrar que no sólo sabe hablar la lengua catalana, sino que además, ha hecho el esfuerzo y ha tenido interés por conocer la cultura del lugar que lo ha acogido con los brazos abiertos, una Girona de la cual ha aprendido su historia, por ejemplo, mencionando ante todo el mundo su sardana más famosa, Girona m'enamora, de Ricard Viladesau. Cita la sardana y se deshace en elogios hacia una ciudad, una gente y una lengua que lo emocionan: "Girona me enamora. Me ha robado el corazón. Girona y los gerundenses sois especiales. ¡Os quiero mucho! Nuestro sueño era subir a Primera... Ya somos de Primera!! ¡El año que viene, más y mejor! Pere, Quique... a Europa!!:
No hay día que Míchel no emocione y demuestre públicamente que le encanta Girona. Primero dijo aquello de Girona, tres veces inmortal, ahora esto de Girona me enamora... Vaticinamos que si la próxima temporada consigue clasificar al equipo para Europa, se pondrá a cantar El carrer dels torrats de Sopa de Cabra. A nosotros sí que nos enamora Míchel.