Aitana Ocaña y Miguel Bernardeu forman una de las parejas sentimentales más conocidas por la juventud. Ella, estrella de OT y de la música a nivel internacional. Él, actor de cierto éxito e hijo de Ana Duato. A pesar de los rumores que los han intentado separar en varias ocasiones, la relación funciona. De momento, pa'lante, como los de Alicante. Recogemos esta expresión para hacer un apunte lingüístico: Miguel no es de Alicante, pero sí natural de Valencia. Aun así, de hablar catalán nada. Ni ganas. Ni idea. Ha viajado mucho, ha vivido en Madrid o los EE.UU., dicen que habla muy bien inglés, aunque con un acento que no es demasiado fino... Con el catalán o el valenciano le debe pasar como a Paula Badosa. No lo considera una lengua, más bien un dialecto de pueblo, prescindible. Bien, todo esto que explicamos es importante para entender qué ha pasado con esta pareja de dos.

Y lo que ha pasado es que la periodista Juliana Canet, presentadora en TV3 y en el 'XL' de Catalunya Ràdio, asistió a la premiere del primer proyecto profesional de Aitana y Miguel, una serie en la plataforma Disney+. Son los protas de 'La Última', una ficción española de la que dicen los entendidos y los que la han visto que no pasará a los libros de historia como producto rompedor, pero que tiene todo el morbo para los fans. Aitana empieza a hacer carrera en el mundo de la interpretación y parece que va sobre seguro. No quiere que esta sea 'la última' producción en la que participa.

Aitana y Miguel Bernardeau / GTRES

La pregunta sobre el catalán a Miguel Bernardeu con la que la lía

Una relación amorosa en la que, de pronto, pasas también a trabajar con tu otra mitad puede ser una experiencia para recordar siempre, o bien para olvidarla rápido. Para fortalecer los lazos o romperlos en mil pedazos. De momento apostaríamos por la primera opción. Ríen, hacen bromas, se muestran compenetrados, divertidos, felices. E inocentes. Mucho. Juliana preguntaba a los tortolitos una cuestión que en Catalunya siempre interesa: precisamente el tema de la lengua, el catalán. "¿Te ha enseñado Aitana alguna palabra en catalán?". Con todo el afecto: como si Aitana fuera una eminencia del Instituto de Estudis Catalans o pariente de Pompeu Fabra. La de Sant Climent del Llobregat no se esconde, lo habla mal. Aun así, Miguel responde a la pregunta y la lía. "Sí, alguna. Ahora no me acuerdo... Fills". Boom. Fills. Hijos. Él dice 'fils', con acento castellano. Pero es de Valencia, no lo olviden. La palabra más básica del diccionario. Tiene bemoles la cosa.

Miguel Bernardeau / TikTok
Aitana / TikTok

Aitana, de piedra, visualizando los titulares: "Embarazada"

La respuesta noquea a Aitana de forma inmediata. Una risa muy nerviosa interrumpe sus intentos de arreglar al posible titular que ya ve venir: "Aitana embarazada". La reacción de ambos: "¡No! Dios mío...". "La he dicho mal, ¿no?. "No, pero que te haya enseñado la palabra hijos es extraño". Ocaña tiene 23 años, no 12. Miguel cae en la cuenta: "Hostia". Acaba de darse cuenta, da demasiada información sobre su intimidad. La cosa queda en el aire. Y ni la reculada de la pareja lo salva. Miguel al rescate lo empeora: "Me enseñó esa palabra porque se la 'l', la 'l'...". No vayos bien. Aitana: "A mí tampoco me sale la "l'". Ay. 'Ll', chicos, 'll'. "Es muy difícil", sentencia ella. Entendido. Comprobado. Pero una cosa... ¿estáis esperando un hijo?

Miguel Bernardeau sabe que la ha liado / TikTok

Del catalán al paritorio en un abrir y cerrar de ojos. Después dirán que nuestra lengua no es útil. Bah.