Miguel Bosé es el gran divo de la música española. Así lo consideran sus fans, así se percibe a sí mismo, y así actúa desde hace un montón de años. Cada día más extravagante, descontrolado, con la percepción de la realidad más distorsionada. Bosé ya no se desgañita sobre los escenarios por problemas graves con la voz; ahora lo hace como adepto, cuando no una especie de profeta, de las conspiranoias más vergonzosas. Después está su mal humor habitual, su actitud arisca, el doble discurso... No es un personaje fácil. Los que lo han sufrido lo saben. Algunos, de cerca. Y miren como les ha ido la cosa: piensen en Nacho Palau, su última pareja conocida y al que ha destrozado la vida con todo el escándalo de los hijos.

Palau, sin embargo, no es el Nacho del que queremos hablar sobre estas líneas. Principalmente porque no es el amor de su vida, palabras textuales de Miguel hace unos meses. Una nueva muestra de desprecio al escultor valenciano, que pasa por graves problemas de salud. Bosé señaló a otro como el escogido. Nacho Duato, el famosísimo bailarín y coreógrafo, hermano de la actriz Ana Duato. Un hombre con quien mejor no tentar a la suerte: su carácter es fuerte. Fueron novios de juventud, el hombre que se cruzó en el camino de Ana Obregón, la entonces pareja oficial del hijo de Lucía Bosé. Y por la razón que sea, Miguel lo ha vuelto a señalar como el hombre a quien más ha amado. ¿La respuesta? La bomba.

Nacho Palau y Miguel Bosé / GTRES

EL 'Yo Dona' ha publicado una entrevista demoledora con Duato, de 67 años, actualmente residente en Rusia como director del Teatro Mijáilovski en San Petersburgo (coincide con Vladimir Putin a menudo entre bastidores de las obras), y con una academia de danza en Madrid. Deja titulares que son bofetadas bestiales: ""A mí ya casi no me llaman para entrevistas porque suelto cuatro animaladas incómodas; cuando digo las verdades resulto antipático porque, en el fondo, estoy criticando a España. ¿Pero cómo le explicas a una mosca que es mejor la miel que la mierda? Eso es lo que sucede en este país. Ocurre por ejemplo cuando me preguntan por mis próximos proyectos; puedo contarlos, pero nadie se va a enterar de nada". De lo que sí que nos hemos enterado, sin embargo, es del mal rollo con el examante bandido.

Nacho Duato / GTRES

Nacho hablaba del amor y de cómo lo percibe: "Yo me encapricho, pero al cabo de unos meses me canso y viene lo de «a ver cómo echo a éste ahora de casa». No creo en el amor para toda la vida, ni en el matrimonio, y en el gay menos. No entiendo que los homosexuales se quieran casar, cuando se trata de una institución que ha fracasado". Entonces salta el nombre de Miguel Bosé. Y lo destruye: "Miente. Últimamente le ha dado una fijación conmigo... Estuvimos juntos porque éramos dos chavales monísimos, nos encantaba ir a los sitios y que todo el mundo nos mirara, y punto. ¡Qué enamoramiento ni nada!" Está rebotado, lo reconoce, "no hablo con él". Pero sí de él: "Lo que le ocurre es que está rebotado con España, de donde tuvo que irse por una deuda con Hacienda. Ahora vive en México, un país que el año pasado se cobró miles de vidas asesinadas, e incluso él fue atracado en su propia casa. Y sin embargo, como todo lo que él hace o le pasa es lo mejor, dice que es lugar más maravilloso del mundo, que le han acogido como nunca... Por eso habla así de España, que antes solo era más libre para hacer chistes de mariquitas y de 'mi marido me pega' en galas de Nochevieja. Menuda idiotez". Le ha hecho un buen traje.