Si algo bueno nos ha enseñado la entrevista de Miguel Bosé en La Sexta, esto sería el sentimiento solidario que une al 90% de los espectadores. Todos a una: Miguel, estás fatal. Pero no fatal de "pobrecito, a ver si entre todos le ayudamos", no. Eso ya lo intentó hacer Jordi Évole sin éxito, e incluso recibiendo más de un ataque del cantante. Está fatal de verdad, de entrar a formar parte del salón de la fama de los disparates universales. Seguro que a Bosé ya le va bien entrar en este selecto club. Su ego aplaudirá con ganas. Ahora bien, el raciocinio hace tiempo que abandonó su organismo. Y su show negacionista, plandemico y antivacunas no ha hecho si no evidenciar que no hay nadie al volante allí arriba. O quizás sí: hay alguien potencialmente peligroso. Ni que sea para la ciencia y la salud pública. Fue un festival de mensajes peligrosos de una supuesta gran estrella internacional, durante una entrevista muy seguida. Un éxito para La Sexta: en todo el estado, a punto de superar su récord de la primera parte, con un 15,2% y 2.659.000 espectadores. En Catalunya se convertía en el segundo programa más seguido, detrás de TV3 con el Telediario y el documental 'El Judici' sobre los presos políticos independentistas: 13'2% y 360.000 fieles.

Miguel Bosé 'cantando' / La Sexta

Jordi Évole alucina con Miguel Bosé / La Sexta

La repercusión está a la altura de estos datos de audiencia, y el resumen es lisa y llanamente: palos y más palos. Una sentencia sencilla pero que se puede expresar de muchas maneras diferentes. Y la entrevista ha hecho que muchos no se pudieran privar de ir a las redes sociales a calificar el espectáculo de la noche. Así lo hizo Jordi Basté: el presentador de RAC1 y TV3 lo definía como "una cabra", pero que le provocaba lástima. Mucho más vehemente, sin embargo, ha sido una figura del Barça con una cuenta en Twitter que haría temblar a Ada Colau. La alcaldesa puede estar tranquila, porque Juan Domingo De la Cruz, El Lagarto, no la tiene entre sus inquietudes. El argentino, mito del Barça de baloncesto durante décadas, es más de ver deportes y entrevistas por televisión. Y mientras veía el partido del Real Madrid, tenía un ojo y una oreja dedicadas a las burradas de Miguel Bosé. Las dos bofetadas son épicas: primero, "como una puta chota". Y como que igual le había quedado demasiado corto y no conseguía expresar plenamente el por qué de este calificativo, nos regaló una ampliación. Esta, de maestro: "este bufón está muy jodido. La cantidad de idioteces que dice". Un bufón, eso sí, que se cree el oráculo.

Juan Lagarto de la Cruz sobre Miguel Bosé

Chicho Sibilio y Juan Domingo De la Cruz / @lagartodelacruz

Miguel Bosé con cara de loco / La Sexta

Decía Miguel Bosé a Jordi Évole la pasada semana que estaba muy satisfecho del recibimiento que había tenido la primera parte de la entrevista. No sabemos exactamente por qué pero todo hace pensar que la segunda parte lo dejará todavía más orgulloso: es lo que pasa cuando te conviertes en una caricatura por tu arrogancia y narcisismo.