Vaya por anticipado que yo, como muchos otros, me declaro fan absoluto de Miki Núñez. El cantante y presentador es de aquellas personas que te las tienes que querer sí o sí. Desde que apareció en nuestras vidas concursando en Operación triunfo, el de Terrassa se ha ido forjando una sólida carrera profesional encima de los escenarios y delante de cámaras, ya sea como cantante de temas absolutamente preciosos como Escriurem o conduciendo programas de TV3 como Eufòria o Zenit. Simpático, amable, empático, buena gente, talentoso, espontáneo y una sonrisa que ilumina, somos muchos los que hemos caído rendidos a sus encantos. Un Miki que estrena disco:

Miki este domingo está donde se esperaba de él, aportando su granito de arena a La Marató de TV3 y Catalunya Ràdio. ¿Cómo? Disputando el partido de fútbol benéfico al lado de exjugadores y de caras conocidas de los medios catalanes, un partido que este año se ha disputado justamente en su ciudad, en Terrassa: "Me piden desde control central que no te lesiones, porque después tienes que cantar por la tarde", le dice Joel Díaz.

Miki Núñez en La Marató TV3

Un Miki a quien recientemente hemos visto en El búnquer de Catalunya Ràdio, confesándose y abriéndose en canal ante Peyu, Jair Domínguez y Neus Rossell. De hecho, se abrió tanto que incluso hizo alguna revelación que le valió un sonoro y espontáneo abucheo por parte del público presente en el programa. ¿Por qué? Por cometer repetidamente, y de manera deliberada, una aberración culinaria, un atentado entre fogones que ha hecho que a todo el mundo se le pusieran los ojos como platos. Le preguntan si le interesa la cocina y qué tal se le da, y él asume que "soy muy simple cocinando. Hago un poco de pasta y verdura, no hace falta nada más". Le preguntan si "¿sabes hacer una tortilla?", lo más básico de las cosas básicas de la cocina. Él dice que sí. "¿Y un huevo frito?"... Y aquí viene la bomba. Atención a la respuesta: "Sííí... Además, le sé dar la vuelta para que la yema...". Momento en el que le cortan inmediatamente, escandalizados. ¿¿Qué vuelta?? ¿¿Qué dices, Miki??? Es que es muy grave esto. ¿¿Qué ha dicho este tio?? Virgen Santa. ¿Qué mierda de huevo, no??", y todo el mundo empieza a abuchearle y él "Ei, ei ei!!. Miki Núñez, confesando que en su casa no mojan la yema, básicamente porque no hay nada que mojar:

Con Miki, hasta al fin del mundo... menos para ir a comer con él unos huevos fritos con patatas.