Enric Hernández pierde cada batalla que empieza como máximo responsable de TVE. El flamante director de Información y Actualidad, un súper-jefe por debajo de la figura temporal de Rosa María Mateo, acaba de decir en una entrevista en El País que "TVE debe vencer su temor al cambio". Los primeros cambios que ha impuesto el exdirector de El Periódico están siendo un fracaso. Ha remodelado la franja matinal, fulminando al mejor periodista que tiene, Xabier Fortes y colocado ua na meteoróloga a entrevistar a Pedro Sánchez en el matinal. Mònica López sabrá pronto cómo le va de audiencia pero otro catalán por el cual apostó TVE ha sido despedido: Àngel Llàcer.
Llàcer era el presentador del concurso del mediodía Bloqueados por el muro y TVE lo ha cancelado por mala audiencia. El viernes pasado hizo un triste 2,4% de audiencia a Catalunya (5,2% en España). Es el último programa de su franja, por debajo de La 2. Como es el programa previo al Telediario del mediodía hace falta un cambio porque hunde al informativo, la joya de la corona de la TV pública. I Hernández ya tiene su primera cancelación de un espacio contratado por él, ha durado un mes y medio.
Llàcer cuando menos obligó a mantener su nombre catalán con la letra A acentuada en catalán: Àngel. Igual en su apellido. No ha hecho lo mismo Mònica López que en TVE ha pasado a ser Mónica con acento cerrado, en castellano:
MÒNICA EN TV3:
MÓNICA EN TVE:
La productora catalana Gestmusic que trabaja con Llàcer no ha conseguido hacerse un lugar en la competitiva franja de 2 a 3 del mediodía. Mònica / Mónica López, nacida en La Seu d'Urgell, lo tiene más fácil: masaje a Pedro Sánchez para el primer día y nada de catalán. Ni el acento. La nueva TVE se parece mucho a la antigua.