Primer día sin Mònica López en 'La Hora de La 1' de TVE: la catalana ha sido apartada de forma fulminante de su programa por las bajas audiencias de la cadena pública y el empuje de los ultras españoles, que la masacraban. Los nuevos rectores del ente público han señalado a la meteoróloga y presentadora, como si fuera la fuente de la decadencia de un gigante audiovisual decrépito y cada vez más irrelevante. En su lugar han puesto a Igor Gómez, que tiene que comerse la patata caliente, pero que sabe que su futuro, probablemente, acabe siendo el mismo que el de Mònica. Y es que el problema, ni mucho menos, era ella. Ni en sueños. El problema de TVE es mucho mayor, inalcanzable. Y su condición de servicio público está hundida, día sí día también, con determinadas actitudes, contenidos y colaboradores.

Una de ellas, tertuliana de este programa. Y reincidente soltando sandeces intolerables. Celia Villalobos, a la que López tuvo que soportar y frenar en varias ocasiones: la última, haciendo el juego al machismos más rancio a raíz del asesinato de las dos niñas de Tenerife a manos de su padre, Tomás Gimeno.

Igor Gómez, nuevo presentador de 'La Hora de La 1' / RTVE.es

Celia Villalobos / RTVE.es

Mònica López, fuera de 'La Hora de La 1' / RTVE.es

La exvicepresdienta del Congreso de los Diputados con el Partido Popular debe ser de las que se han alegrado de la caída de la presentadora saliente. No lo dirá, porque juega al cinismo igual de bien que al Candy Crush, pero la malagueña representa a la vieja carcundia pepera, predecesora de VOX. Si se sienta en una silla del programa es sólo para lanzar consignas y mensajes que forman parte del ideario de esta parroquia tan tolerante y moderna. En este caso, el tema ha sido las agresiones homófobas, una lacra trágica y que se ha reavivado de forma brutal, como ha pasado con el joven Samuel en Galicia. La impunidad de los agresores resulta vomitiva, pero también es aberrante escuchar a Celia realizar discursos en los que rechaza el delito de odio contra el colectivo LGTBI+, menosprecia la situación de la violencia, habla de "pensamiento único" y de una nueva religión. De hecho, ha llegado a exclamar que los verdaderos delitos de odio son aquellos que sufren los españolistas para llevar banderas de su país. Un 'combo' impúdico de primero de facha, vaya. La red arde contra la exministra y ahora estrella de RTVE.es.

Celia Villalobos, en la "nueva" 'La Hora de La 1' / RTVE.es

Y el drama era Mònica, tú. La única que paraba los pies a la extrema derecha. Por eso se la han cargado.