Mediaset es una bicoca para la abogada ultra Montse Suárez. Sale casi en todos los programas de la cadena, al menos en todos los producidos por el catalán Óscar Cornejo, de La Fábrica de la Tele. Eso son muchas horas de televisión a la semana, buenos ingresos y un dolor de cabeza: reinventarse cada 15 minutos para crear un 'look' diferente cada vez. Entre elecciones de vestuario, maquillaje excesivo y retoques diversos, no sabemos de dónde saca Suárez el tiempo necesario para estudiar y preparar los temas. Da igual: sus opiniones, más que cátedras de derecho, están diseñadas exclusivamente para incendiar el plató o apoyar la tesis del 'jefe'. Por ejemplo, Risto Mejide, que la ha tenido en 'Todo es Mentira'. El qué no importa, más bien es el cómo. Y vaya cómo.
Suárez se ha superado con un vestido blanco nuclear imitando ganchillo con transparencias, que permiten ver a la perfección sus venas inflamadas a medida que sube el tono de voz. Cada vez más rubia, pintadísima y con los brazos tapados para no enseñar aquello que todavía no ha pasado por quirófano, es una especie de aparición fantasmagórica e inquietante. Alguien le tendría que decir que estamos a punto de llegar a Navidad, y no a Halloween. Todo un cuadro, cierto, pero parece que es el cuadro favorito de Mediaset.
Si se la han perdido, no sufran. Montse es como los espectáculos de Eurodisney, pero en versión gore: cada hora, nueva función. Eso sí, no habla mucho, pero hace 'bulto'.