Tamara Falcó, o mejor dicho, la niña de los ojos de Isabel Presley es, sin lugar a dudas, la hermana más mediática de toda la numerosa familia. Madre e hija son un dúo icónico, dos socialités de la prensa del corazón. Cuando menos, sus dos vidas han dado mucho para hablar, la vida de la Presley siempre ha sido digna de titulares y portadas. Tres matrimonios, y cinco hijos, un historial para anotar, pero que Tamara Falcó no quiere heredar, ella ya ha encontrado a su príncipe azul, o eso cree. Después de romances fugaces, Íñigo Onieva llegaba a la vida de Tamara Falcó para quedarse a pesar de las circunstancias. Ni una infidelidad en medio detuvo la boda tan deseada por la marquesa de Griñon, ni el "nanosegundo del metaverso" frenó su amor, ella está su lado a pesar de las circunstancias.

Tamara Falcó e Íñigo Onieva a la boda / Instagram
Íñigo Onieva y Tamara en un safari durante la luna de miel / Instagram

Su vida amorosa no va acompañada de la buena suerte, digamos que el universo le ha enviado señales antes, durante y después de pasar por el altar, pero ella se hace la desentendida. Sin embargo, Tamara Falcó protagonizaba una boda de ensueño, y el matrimonio se embarcaba en una luna de miel eterna que todavía parece que no se haya acabado. La vida de la pareja no está demasiado ocupada con respecto al ámbito laboral: ella sigue ejerciendo como influencer, marquesa y colaboradora semanal para "El Hormiguero" sin embargo, él trabaja, pero aún no hemos averiguado exactamente cuál es su cargo.  No solo sabemos que es un mujeriego de categoría, Onieva tiene estudios superiores en ingeniería industriales y, cuando lo conocimos como chico de Tamara, trabajaba como relaciones públicas en dos restaurantes de Madrid, pero justo unas semanas antes de su enlace con la marquesa se quedaba en paro. Pero bien, fue jurar el "si quiero" y recuperar en seco todo el poder como en "bussines boy" Íñigo Onieva es un hombre de negocios y ella está enamorada de esta faceta. Excepto de los viajes que le comportan los negocios.

Tamara Falcó e Íñigo Onieva / Europa Press
Tamara Falcó e Iñigo Onieva / Instagram

La etiqueta de la separación los persigue desde el minuto uno, y cada movimiento extraño que no sigue la tradición ya es un argumento más para reforzar la tesis de una futura ruptura. Hace unos días que los medios de la prensa del corazón aseguraban que la marquesa había ido a dormir a casa su madre. Ui, asunto extraño si tenemos en cuenta que ya no conviven en pecado y tienen el permiso de nuestro señor para dormir juntos. Pero resulta que estos últimos movimientos de la marquesa han hecho focalizar todas las portadas de la prensa rosa. Después de rumores y especulaciones, Vanitatis ha publicado en exclusiva la razón de estas escapadas en casa la Presley, según los informan fuentes próximas al matrimonio, Tamara Falcó habría ido a dormir en casa su madre a raíz de los viajes de negocios de Íñigo Onieva. No le gusta nada dormir sola en casa.

Según ha publicado la revista citada, Tamara Falcó se trasladaba a la casa de su madre, la cual le queda en escasos minutos de la vivienda que adquirió después de la pandemia a Puerta de Hierro, justo en la misma urbanización. Así pues, Íñigo Onieva se habría marchado unos días de viaje en búsqueda de nuevas líneas de negocio. El último que conocíamos después del paro fue su cargo en el mundo del ocio de noche ofreciendo servicios en la discoteca Lula Club de Madrid. Además, lo acababa de gestionar comprando el edificio por tan solo 78.000 euros, un chollazo. Ahora, además de este supercargo que lo tiene desocupado gran parte del día, está en búsqueda de nuevos asuntos laborales, los cuales se desconocen. Dejar sola a las noches a Tamara Falcó tiene rápida solución para la marquesa, volver a casa de mamá, donde recientemente debió coincidir con su hermana Chábeli.

Isabel Presley va recogiendo poco a poco a todos sus hijos, aunque sea temporalmente. Después del retorno de Chábeli, parece que Tamara Falcó está a un paso de volver de forma permanente, los negocios de íñigo Onieva van para largo.