La colaboradora vasca de Telecinco, Nagore Robles, es una persona que desprende fuerza y contundencia. Es la impresión que tiene todo el mundo de la actual pareja de la presentadora catalana Sandra Barneda, desde que entró en el universo mediático de Mediaset como polémica participante de 'GH' en 2009. Siempre sonriendo o discutiendo en los programas y debates de la cadena, nadie se imaginaba el drama personal que ha explicado en una entrevista de Youtube sobre salud mental: hace terapia desde hace años para superar traumas, pérdidas irreparables y una infancia conmovedora: "fue horrible. Crecí en una familia con poca felicidad, poca educación, poco amor y poco respeto".
La de Bilbao no ha dado más detalles sobre qué era lo que pasaba en aquel entorno familiar tan hostil. Y sorprende, cuando menos repasando el Instagram de la televisiva. Allí encontramos una publicación que hace pensar en todo el contrario: recuerda con emoción las vivencias al lado del padre, madre y hermana. Según ha explicado ahora al youtuber Luc Loren, la relación real era muy diferente. Quizás el porqué es, precisamente, la técnica que ha utilizado durante buena parte de su vida para defenderse ante las adversidades: "Cuando salía de casa me ponía la careta de todo está bien, era lo que me habían enseñado".
Nagore explica el mal trago que supuso la muerte de su mejor amiga, víctima del cáncer. Y que fue el detonante de ponerse en manos de profesionales, que le ayudaron a salir del pozo y "convertirme en la mujer que soy ahora", dejando atrás a "aquella niña que sufrió tanto y tuvo que hacer de todo para poder sobrevivir". En la misma línea, confiesa la razón que le hizo retocarse la nariz: la inseguridad. "Me hubiera encantado que me hubieran enseñado a quererme".
Es la primera vez que la Nagore se abre de esta manera, y ha dejado impactados a los fans. Su "dureza" es sólo una coraza de alguien que ha sufrido, ha luchado, y parece que ha ganado. Felicidades.