17 de mayo de este año: último día en que Nagore Robles cuelga una foto en su cuenta de Instagram donde se la ve con Sandra Barneda. Dos meses atrás, 13 de abril: último día en que Sandra Barneda cuelga una foto en su cuenta de Instagram donde se la ve con Nagore Robles.
Sólo es un indicativo. Hay parejas que llevan toda la vida juntas que se marchan de vacaciones por separado o que, directamente, no cuelgan fotos del otro, y tan felices y enamorados. Pero ciertamente, desde que la presentadora catalana y la colaboradora vasca formalizaron su relación, siempre ha habido algún momento en que alguno o alguno otro ha puesto el punto y final a la pareja. La relación entre Barneda y la tertuliana empezó hace tres años, una relación que todo el mundo aplaudió y envidió. Dos mujeres que habían encontrado el amor dentro de un plató de Telecinco y que estaban radiantes la una con la otra.
Pero no son pocas las veces que, a pesar del amor entre ellas dos, han roto y se han reconciliado, han pasado por momentos maravillosos y otros que no tanto. Y parece que esta vez podría haber sido la definitiva ruptura entre las dos, tal como asegura el portal Cotilleo. Ninguna de las dos ha dicho esta boca es mía, pero un mensaje críptico en un Stories en el Instagram de Robles parece ser la prueba fehaciente para que sus seguidores se pongan las manos a la cabeza: "Y claro que mueres de miedo, te has tenido que reconstruir incontables veces y no quieres romperte de nuevo, pero dime tú si cada vez que regresas, no eres un poco más fuerte". Un texto que va en la línea de los que le hemos podido leer últimamente: “Hay días en los que no te apetece ser la más simpática ni sonreír tanto”, “¿Cuál es vuestro plan hoy? El mío soy YO” o “Idealizamos mucho el sentirnos bien, estar contentos, enérgicos y ser perfectos al fin y al cabo”.
El año pasado, Nagore se compró un piso en el madrileño barrio de Chueca después de un bache con la periodista catalana. Después se recondujo la situación, con cada una en su casa, y compartiendo a la perra Nash. Parece, sin embargo, que ahora sólo seguirán coincidiendo delante de las cámaras.