Reconocemos que somos fans devotos de Joc de cartes. El programa presentado por Marc Ribas donde tres restaurantes diferentes compiten por ser los mejores dependiendo de la categoría propuesta por cada programa. Rendidos a un programa que consigue sorprendernos cada nueva temporada, y el estreno de la última, que ha tenido lugar este miércoles, no ha defraudado. Todo lo contrario, ha generado un hecho que nunca habíamos visto en toda la historia del programa. Pero vayamos por partes. Para el estreno de este nuevo "Joc de cartes estiu", que buscaba el mejor restaurante de guía turística de Barcelona, han conseguido un récord histórico de cuota, un descomunal 26,8%, una cifra al alcance de muy pocos programas de tele. Maravilloso.
Una cifra espectacular, conseguida a base de muchos ingredientes: las ganas que volviera el programa, el carisma del bueno de Marc, pero, sobre todo, gracias a una de las parejas concursantes, que nos dejaron a todos los espectadores con los ojos como platos. En la imagen que ven, los que están exultantes son la pareja del restaurante ganador, Sofía y Bruno de Casa Ràfols, pero los verdaderos protagonistas fueron David y Miquel, de L'Àmfora, autores de la 'paella experience', la 'Vulcano, una paella ahumada. No fue el único momento donde Ribas y los espectadores alucinamos. Oyéndolos hablar de neurogastronomía o croquetas sexuales nos dejaron en shock. Dos restauradores muy peculiares que buena parte de la red decían que vendían más humo que el humo de su 'paella experience'...
Su palique no pudo evitar que las notas que recibieran por parte de los otros concursantes fueran suficientes. De hecho, casi suspendieron en todo, cocina, comida y precio.
Unas notas que probablemente generaron una situación nunca vista antes en la historia del programa, cuando llegó la hora de las valoraciones, con Marc Ribas presidiendo la mesa y dirigiendo aquella conversación que siempre hace con los concursantes, cuando se les revelan las notas que han sacado y se dicen a la cara si están de acuerdo o no. Un momento culminante del programa, el momento de más tensión y emoción, donde a menudo, los puñales van que vuelan. Marc Ribas se gira a la izquierda y encuentra a los representantes del Babula Bar. Se gira a la derecha y ve a los de Casa Ràfols. Pero mira adelante y hay dos sillas vacías. Por primera vez, dos concursantes no se han presentado: "Alegando problemas personales que nosotros no hemos podido contrastar, han decidido no venir. Esto es una cosa que no había pasado nunca en ninguna de las ediciones del 'Joc de cartes':
Los fantasmas de las paellas... como dice esta espectadora... Quizás por eso hicieron ghosting y no se presentaron... Una vez más, Joc de cartes nos sorprende. Y, como se ve por la audiencia, había muchas ganas que volvieran a la parrilla de TV3... No como las pocas ganas que tenían los de L'Àmfora de volver al programa.