Todo el mundo recuerda el Merlosplace, la trama de cuernos, doble vida, y ridículo público que protagonizó el periodista de ultraderecha Alfonso Merlos durante la pandemia. Cuando todos los ciudadanos se tuvieron que encerrar en casa, la TV los salvó. Más en concreto Sálvame, que encontró un gran filón de entretenimiento. Alfonso Merlos en aquella época era una estrella de la TV, especialmente en Telecinco, los programas de Ana Rosa Quintana y en las TV del PP y Vox que subsisten en la TDT como 13TV o Intereconomía. Adorado por los suyos y detestado por los otros por sus ideas racistas, clasistas y anticatalanistas. Y por su look de derechas, cayetano-madrileño, traje a medida, peinado con raya y gomina. Consiguió también un trabajo como Jefe de Comunicación del Colegio de Abogados de Madrid. De repente lo perdió toda por una conexión con su casa, ya mítica.

Alfonso Merlos chica semidesnuda
Alfonso Merlos y una chica semidesnuda, EDA TV
mujer semidesnuda cuernos Merlos twitter
Alexia Rivas semidesnuda en casa de Merlos, EDA TV

Era la época en que por pandemia se evitaban los desplazamientos y los invitados salían en TV por videollamada desde su casa. Y en casa de Merlos se cocía una infidelidad televisada en directo: Merlos era el novio de Marta López, la famosa de Gran hermano que todavía hoy es tertuliana de Telecinco. Pero llevaba una doble vida sentimental, o sexual, y engañaba a su pareja con otra famosa de Telecinco, la reportera de Socialité Alexia Rivas. Merlos, entrevistado en casa y detrás suyo aparece una chica en bragas y sujetadores: la amante. Marta López se enteró de los cuernos al mismo tiempo que toda España. Fue humillada por ese Merlos que difunde ideas católicas sobre familia, castidad y honor. El personaje fue el hazmerreír durante un tiempo. Incluso Alexia Rivas lo dejó, estaba enamorada y también se sintió engañada a pesar de saber que Merlos jugaba a dos barajas. Las empresas que lo contrataban se dieron cuenta de que un individuo con doble vida, doble moral y doble discurso ya no tenía credibilidad. Era incluso el presentador de las noticias del canal televisivo de la Iglesia. Lo echaron de todo. Un juguete roto de la derecha.

Marta López i Alexia Rivas cara a cara, Telecinco
Marta López y Alexia Rivas cara a cara, Telecinco

Han pasado 4 años de todo aquello y Merlos ha hecho lo que hacen todos los que participan de este circo: cobrar. Reclamó contra La Fábrica de la Tele, productora de Sálvame, por injuriarlo. Con tantas horas de TV de Merlosplace le dijeron de todo: "clasista, cobarde, tonto útil, incívico, mentiroso, antiguo, machista, infiel, traidor, hipócrita, sinvergüenza, gañán y cateto" según recopila el juez que condenó a Sálvame a indemnizar a Merlos con 800 mil euros. Mucho dinero, por 4 años fuera de la TV. Todos contentos: Telecinco  se forró con la mucha audiencia que dio el asunto y Merlos lo cobra ahora como parte del show. ¿A qué se dedica, apartado por los grandes medios? Con su aspecto podría estar en la Sección Caballeros de cualquier Corte Inglés, pero Merlos trabaja para una empresa de Marbella, Dexter, que concede préstamos rápidos a un interés muy alto. Un prestamista de toda la vida. Y su papel en el periodismo ha quedado reducido a un periódico digital minúsculo sobre economía, Elmundofinanciero.com. No era lo que soñaba cuando abrazaba a su joven amante Alexia cerca del mar. La cara de ambos ya reflejaba que no veían claro un futuro juntos:

DL u461105 035
Alfonso Merlos y Alexia Rivas en Ibiza el verano de 2020, GTRES

Merlos ha sacado petróleo de engañar a su pareja con una joven reportera y dejarse pillar en una videollamada pública para toda España. Tiene 800 mil euros más, pero a qué precio.