En la previa del partido de la jornada, Atlético de Madrid-Barça, se ha abierto el típico debate sobre los uniformes del Barça pero ahora con la ropa de calle. El día del estreno de la nueva equipación casual ha sido una fecha importante: la expedición viaja a Madrid luciendo la nueva línea de ropa con las cuatro barras. Ni así se salva. Es excéntrico hasta decir basta:
Ni las respectivas mujeres instagramers salvan el espanto de los chalecos grises de universitario americano, los pantalones con franjas blancas como de basurero y calzado libre. Para redondearlo, el Wanda es un estadio lleno de escaleras mecánicas que parece El Corte Inglés. La red todavía ríe:
El único que no va disfrazado es Ernesto Valverde. Una lástima porque si pierde el partido ya se sabe de qué es el disfraz: de astronauta.