Muchos son los famosos, y no famosos, que, a través de sus redes sociales, especialmente su cuenta de Instagram, se sinceran con sus seguidores y cuentan con pelos y señales situaciones complicadas o experiencias nefastas que les hubiera gustado no vivir y seguro tardarán mucho tiempo en quitarse de la cabeza. Experiencias para olvidar como la que Nuria Marín, presentadora catalana de Telecinco, haciendo gala de su naturalidad y sinceridad, ha contado en las últimas horas con varios vídeos de poca duración.

Unos vídeos que han llamado la atención de muchos de sus seguidores, más de 171.000 personas, en los que Nuria, directa como siempre, cuenta la mala experiencia que en más de una ocasión ha vivido en los trenes que hacen el trayecto de Madrid a Barcelona y viceversa. Y es que Marín vive en Barcelona pero, por motivos de trabajo, viaja muy a menudo hasta la capital española. Viajes que suele hacer en tren de alta velocidad, que la dejan en el centro de Madrid, en la estación de Atocha, donde un coche de Mediaset, empresa en la que está vinculada desde hace mucho tiempo, la espera para llevarla directa a la tele, ubicada en la zona de Fuencarral.

Nuria Marín / MEDIASET

"Acabo de llegar a casa de Madrid, venía en el AVE y tenía muchas ganas de compartir estos stories con vosotros". Así empieza el primer de los varios vídeos que la catalana ha publicado en su cuenta de Instagram, durante las últimas horas, después de regresar de Madrid donde se trasladó el sábado por la noche para poder presentar el programa Socialité el domingo 6 de febrero, ocupando el lugar de María Patiño, presentadora habitual del espacio del corazón de los fines de semana.

"Siempre me indigno en el AVE" añade la catalana. Y es que Nuria Marín, cuenta, ha tenido siempre muy mala suerte con las personas que se encuentra en los trenes. Personas, dice, que no paran de molestar y no tienen modales haciendo que su viaje, lejos de ser tranquilo y relajado, sea toda una odisea. "Siempre me encuentro con la persona a la que llaman por teléfono y, a parte de tener el teléfono a todo volumen, lo deja sonar un buen rato y quiere que todo el vagón se entere de la conversación", afirma. "Luego también está la persona que se dedica a los negocios y quiere que todos sepamos sus negocios y lo bien que le van", añade. Fotos de la presentadora, en el salón de su casa de Barcelona, contando sus malas experiencias en los trenes que comunican Madrid con Barcelona y viceversa.

Nuria Marín / INSTAGRAM

Nuria Marín / INSTAGRAM

Nuria Marín / INSTAGRAM

"Luego está la persona que mira vídeos, ya sean de Whatsapp o TikTok, y lo mejor es que lo hace a todo volumen y sin auriculares", explica. "Y luego está la persona que te pide todo el rato que te levantes para que la dejes pasar y ocupa el pasillo con su maleta de manera que no puedes ir al baño a último momento o te tienes que esperar a que baje del tren", sentencia la catalana visiblemente molesta. No es para menos. Una serie de vídeos, seis en total, que Marín termina con la siguiente pregunta al aire: "O sea, ¿me entendéis o no me entendéis?".

Un contenido en sus redes sociales con el que la de Catalunya, que cumplió 40 años el pasado mes de septiembre aunque parezca que tenga menos edad, demuestra que pese a ser famosa y ganarse muy bien la vida en Mediaset, al final del día es una persona normal y corriente a la que le afectan exactamente los mismos problemas que al resto de ciudadanos. Nuria Marín, una vez más, ofreciendo en sus redes sociales el contenido de calidad que muchos desean. Salseo en televisión y también en su cuenta de Instagram. Como diría la Pantoja: "Maravilloso".