Oriol de Balanzó es una de las piezas fundamentales de uno de los programas de más éxito de la radio catalana, La Competència en RAC1. El programa que cada mediodía escuchan miles de oyentes y que tiene un sello propio gracias a las voces y el talento de sus directores y presentadores, Òscar Andreu y Òscar Dalmau, pero también gracias a los excelentes guionistas que dan cuerpo a las conversaciones entre la Angelines, el Jep Cabestany y compañía: Natza Farré, Tomàs Fuentes y el mismo Oriol de Balanzó.
@orioldebalanzo
De Balanzó y el resto de compañeros tienen la habilidad de provocar sonrisas hablando de hechos que no tienen nada de gracia, como es la situación de los presos políticos, las barbaridades que sueltan algunos políticos o el juicio al procés. Sacan punta y llegan al fondo de las cosas disfrazando la realidad con humor y un punto de vista inimitable. Pero ahora, el periodista ha hecho una serie de reflexiones sin ningún toque humorístico, in situ desde el Tribunal Supremo, que han generado el aplauso unánime en la red. Desde hace un día todo el mundo habla del hilo que él mismo empezó en Twitter explicando su experiencia. Un De Balanzó que nunca se ha escondido de expresar su rechazo por la situación de los presos políticos y que ha pedido su libertad a menudo:
El guionista de La Competència explica su experiencia por primera vez en la sala donde se está juzgando a Junqueras, Forn, Romeva y compañía. "Os narro sensaciones cronológicas apuntadas en la libreta saliendo con una sensación de adrenalina y vacío. Con la certeza de que el sistema lo sostenemos nosotros y se aguanta por un hilo...". Es la declaración de intenciones de un De Balanzó que después sigue haciendo pensar con sus reflexiones. Un decálogo formado por veinte puntos. Como este: "1) Todo el Mundo es muy amable y te mira con con una extrañeza como si no esperaran que tú también lo fueras. 2) Cada 3 segundos tienes una indicación que te recuerda que ellos tienen el poder y tú no. Sé que no es así y en realidad no me incomoda... Querría decirles que no hace falta, que parecen más débiles. Que son ellos quien dependen de todos nosotros para continuar allí. Sin rencor".
Su presencia como espectador en el Supremo coincide con las jornadas protagonizadas por las pruebas documentales y los vídeos. Un hecho que al cronista le hace recordar momentos sobrecogedores y significativos:
El último punto es un zasca en toda regla al ademán del juez Marchena: "20.Marchena nos ha recordado en 3 ocasiones que es generoso y magnánimo. Pienso que en realidad lo estamos siendo nosotros. Y él, pobre, no lo sabe". Su reseña del juicio ha provocado el agradecimiento, las lágrimas y la rabia de la red: