En precampaña electoral todo vale: Albert Rivera haciendo ver que disfruta cogiendo a un bebé en brazos, Santiago Abascal haciendo ver que tiene miles de cameruneses en sus filas o Pablo Casado desesperado por no perder el voto rural. Veremos muchas fotos de Casado entre animales, en el campo, salvaje, rupestre y agropecuario. En las provincias más despobladas se reparten los escaños sin necesitar un gran número de votos y por lo tanto con más facilidad. Casado empieza una sobreactuada campaña rural con una entrevista en Telva, la revista femenina del diario El Mundo, y unas fotos en familia: la esposa Isabel Torres y los hijos Paloma y Pablo con una mantita a cuadros en el campo:
La entrevista es de aquellas "no políticas", la cara familiar del candidato. Una pieza periodística de propaganda, un espacio electoral sin rótulo que lo advierta: "El político nos deja ver a la persona". Todo tan dulzón que cuesta tragar. Novedades como "Casado toma vitaminas cada mañana" o confesiones tipo "Siempre cenamos juntos, espero a Pablo para cenar aunque sean las 12 de la noche" o "Lo nuestro fue un flechazo, me acerqué a ella y le dije ¿Quieres ser la madre de mis hijos?". Pablo Casado admira de su esposa que "Me apoya porque me quiere mucho y por sentido de responsabilidad. Es una patriota". Añade "Es discreta y me complementa" Entre la impudicia y la vergüenza ajena.
EFE
Para fisgones, la respuesta clave a ¿Es Pablo Casado friki de algo?: "Soy un friki de los coches. Todas las semanas me compro cinco revistas de motor. Enséñame un retrovisor o cualquier coche de frente desde los años 80 y te diré la marca y modelo". Toda la entrevista regada con fotos campesinas, quizás para tapar otros que lo persiguen como la de la comida en familia en un restaurante de comida rápida que desaconsejan todos los dietistas infantiles o aquella otra con su mujer vestida con pieles en una gala benéfica.
GTRES
Con un experto en coches que cada semana se compra Solo Moto, Solo Coches y así hasta cinco revistas de motor, España, y Foro coches, duermen tranquilos.