Pablo Iglesias e Irene Montero han recibido la mejor de las noticias. Sus bebes han recibido el alte del hospital este lunes después de tres mesos ingresados y ya están en casa. Así lo aseguran fuentes próximas al matrimoni en Europa Press, que afirman que están muy felices.

Se convirtieron en padres el pasado julio, pero los pequeños mellizos nacieron con tres meses de antelación. El parto prematuro llegó a los seis meses de embarazo, por lo que Leo y Manuel tenían que estar en una incubadora hasta que cogieran el peso necesario y los pediatras certificaran que no tenían ningún tipo de secuela. 

Ahora empieza una nueva etapa en la evolución de los pequeños, como todos los niños prematuros. El tratamiento les ayuda a superar un proceso madurativo que les acerca a los niveles de niños de su edad.

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Montero publicó hace un mes un largo mensaje en Facebook en el que informó sobre la última hora de la salud de los hijos. El objetivo era agradecer todo el apoyo que han recibido durante estas primeras semanas de incertidumbre con unas palabras bien bonitas. "Desde aquel 3 de julio en el cual llegaron por sorpresa, nos repetimos una y una otra vez la misma palabra: vamos. Se trataba primero de salir adelante y después de ir superando etapas de recuperación. Cada vez que les mirábamos les repetíamos lo mismo: vamos, hijos, vamos. Dicen que la amnesia infantil hace que olvidamos todo lo que vivimos en nuestros primeros años. Nos alegra que Leo y Manuel no recuerden los tubos o electrodos que les acompañaron en la unidad de cuidados intensivos, que olviden los sonidos de los monitores que medían su ritmo cardiaco y la respiración".

El comentario, lleno de significado, fue muy sincero y tierno: "Antes de que pudieran alimentarse sólo de la leche de Irene, fue la leche de otras madres la que les ayudó a vivir. Cuando fue suficiente, la de Irene también fue dada para otros niños. La sanidad pública hizo a nuestros hijos hermanos de leche de muchos niños y niñas como ellos".

EFE

La pareja quiso destacar, sobre todo, que sin un sistema sanitario tan bueno, sus hijos no estarían tan bien: "Todo ha sido posible gracias a un equipo de profesionales de la sanidad pública además del cariño y apoyo de nuestra gente. Nuestros hijos tienen hoy dos meses porque nacieron en un país que cuenta con una cosa mucho más importante que cualquier himno o bandera: un sistema sanitario universal". "Hemos tenido la suerte, como todos los padres y madres de niños prematuros del hospital Gregorio Marañón, que el doctor Manuel Sánchez Luna fuera su ángel de la guarda", continuaban. Y a partir de aquí, pasaban a dar las gracias a todo el equipo médico con nombres y apellidos, así como también han recordado el apoyo de otros padres y madres de niños prematuros.

La familia y los amigos más próximos se han volcado en darles apoyo, pero Iglesias y Montero tampoco olvidan las atenciones de todo el mundo: "No hemos dejado de recibir el cariño de muchos militantes de nuestro espacio político que han encontrado unos minutos para enviarnos ánimos, preguntarnos cómo iba y llenarnos de abrazos. Un proyecto político se construye sobre todo con grandes dosis de amor. A todos y todas, gracias".

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"Tampoco olvidemos que algunas de las palabras más bonitas, algunos de los abrazos más sinceros, algunos de los consejos más provechosos, vinieron de nuestros adversarios políticos. Somos republicanos, pero recordaremos que un rey y una reina llamaron para preguntar por nuestros hijos y que todos nuestros rivales preguntaron con frecuencia cómo estaban. Somos ateos, pero explicaremos a nuestros hijos que nuestros amigos creyentes rezaron por ellos", han acabado diciendo, con una mención especial a la atención del rey Felipe y Letizia.

El objetivo de esta nota es dejar un capítulo muy difícil atrás: "Una manera de cerrar una etapa cuidando la cicatriz que deja para no olvidarla nunca, porque esta cicatriz está llena de amor por nuestros hijos. Somos".