Después de una semana de imágenes indecentes y peligrosas en las calles de Madrid, con disturbios, brazos derechos levantados, cánticos de Cara al sol, banderas españolas preconstitucionalistas con el pollo y proclamas fascistas, la prensa derechosa ha tapado las actitudes ultras y megaultras poniendo el foco solo en qué malos que son los indepes y qué malo que es Pedro Sánchez por amnistiarlos. A buena parte de la prensa y opinión pública española solo le preocupa que se llegue a acuerdos con Carles Puigdemont, y si para protestar contra eso se vuelven a ver imágenes en España más propias del franquismo, ya les está bien. Tratan de estirar la cuerda tanto como puedan, tratan de elevar el tono y la agresividad verbal y tratan de romper la cuerda si con eso se pueden llevar por delante el pacto PSOE-Junts. La catalanofobia ha estado más presente que nunca en televisiones, diarios... y radios. Lo que ha sorprendido es que también se encontrara presente en programas donde en teoría, se tiene que hablar de goles, de asistencias y de partidos de fútbol. Y es lo que acaba de pasar con Paco González.
El locutor estrella de la COPE, en su Tiempo de juego de este fin de semana, ha querido empezar programa hablando de política y no de deporte. Ya lo dicen que a menudo, la política se parece cada vez más al fútbol, pero el periodista asturiano ahora ha hecho de hooligan con un editorial abyecto, lleno de falsedades y con un tufo deliberadamente anticatalanista. Todo vale para meter más mierda. Además, la manera como lo ha hecho ha sido miserablemente demagógica, utilizando a su difunto amigo Pepe Domingo Castaño para sus propósitos. ¿Cómo? En una carta donde se dirige personalmente a él, su compañero de cadena histórico que murió hace unas semanas, para decirle la situación que se está viviendo en España: "Hoy estarías con un cabreo extraordinario".
González, en el programa de este sábado, ha leído una carta a Castaño, de quien destaca que "de las pocas veces que te he visto discutir fue por el referendum ilegal, con Pichi Alonso. Ahora te subirías por las paredes". Y atención a la catalanófoba frase que suelta: ""Y la pinta que tiene todo esto es que dentro de unos años va a ser mejor nacer en Barcelona que en Ciudad Real, aunque seas de padres manchegos, porque vas a tener más y mejores derechos". Hay que ser miserable. "Está en peligro la solidaridad interterritorial y a quién le importa ya que los trenes lleguen a Extremadura o a la España vaciada llegue internet. Cada uno a lo nuestro. Los nacionalistas se preocupan por su trocito de tierra y los políticos por seguir cuatro años más en el Gobierno"... Curioso. ¿Ahora Paco González se preocupa de España? No recordamos haberle oído escribir cartas antes a Pepe Domingo Castaño preocupado por la España vaciada o los trenes de Extremadura. En cambio, ahora se pone las manos en la cabeza, cuando está de por medio Puigdemont y Catalunya. Vergonzoso. Oportunista. Y abyecto.
"En España está en peligro hasta el mapa que tiene 500 años. Está más cerca el reconocimiento de España como nación, más cerca el referendum de independencia de Catalunya. A mi me da igual que cambiemos el mapa de España, pero si lo hacemos en consenso entre todos y a todos nos parece bien. Pero hacerlo mintiendo, después de haber prometido lo contrario hace cuatro días para seguir cuatro años más en el cargo, es tremendo". Lo que es tremendo es la impunidad con la que según quien dice barbaridades en antena. "España es uno de los países más antiguos de Europa y se pueden cargar en una semana por la cara. Pepe, estamos en manos de García Page y la posibilidad que sus 8 diputados no voten a Sánchez. Así están las cosas por aquí, Pepe. Menos mal que no estás cerca". También habló sobre el Girona. Lo que, a pesar de ser prudentes, está más cerca que nunca, es la posibilidad de que el Girona gane la Liga.
Los de Míchel son primeros antes de un nuevo parón por selecciones, con dos puntos de ventaja sobre el Madrid y cuatro sobre el Barça. El conjunto catalán, al que como dijo Piqué, "se le está poniendo cara de Leicester (el modesto equipo inglés que sorprendió ganando la Premier contra los todopoderosos en el año 2016)", está haciendo una temporada para soñar, jugando y marcando más goles que nadie. Y durante el partido Rayo-Girona del sábado en Tiempo de juego, el narrador Rubén Martín dice que "en el fondo, todos somos un poco del Girona". Todos asienten, por aquello de ver a un equipo como el Girona ganando la Liga en lugar de los grandes de siempre, y él, cara de palo, dice que "yo no". ¿Por qué? según él, "Yo soy clasista. Hay equipos que tienen historia que sí me gustaría que ganaran la Liga: el Oviedo, el Sporting, el Cádiz, Málaga, Zaragoza. Pero es que... el Girona, está haciendo un milagro sin fuerte tradición en Primera. Aplaudo la gestión de club y de equipo".
Curiosamente, el equipo preferido de Carles Puigdemont es el Girona. Seguro que no tiene nada que ver para que González no quiera que gane el Girona... Segurísimo.