Hace ya tres años que Paloma Cuevas y Enrique Ponce decidieron poner punto y final a su matrimonio. Dos décadas de amor que terminaron por problemas en la convivencia. Aunque la ruptura se hizo pública tras la pandemia, cuando el torero se dejó ver en compañía de una joven, su actual pareja, ya habían roto la relación meses antes del confinamiento. El de Chivas se ha ido a Almería con Ana Soria, mientras que la empresaria se ha quedado en Madrid con las hijas de ambos. Cada vez que Enrique quiere ver a las pequeñas debe hacerlo en la capital de España. Y por supuesto, sin la presencia de la abogada.

Para firmar un tormentoso divorcio, Paloma Cuevas obligó a Enrique Ponce a cesar su actividad en redes sociales. De hecho, las hijas de ambos descubrieron la nueva relación de su padre mediante esas publicaciones. Después de un tiempo en silencio, el torero y la estudiante dan un fuerte golpe sobre la mesa. Están dispuestos a contar su historia de amor en uno de los programas de máxima audiencia. Pablo Motos entrevistará el próximo martes 23 de mayo a los tortolitos en ‘El Hormiguero’. Su primera entrevista en televisión juntos. Sorprende que una aparición televisiva no haya llegado antes, ni que la almeriense no haya aceptado contratos de publicidad como influencer.

Enrique Ponce y Ana Soria

Paloma Cuevas tiene mucho miedo a lo que puedan contar ambos. No quiere volverse a poner en el foco mediático y mucho menos que sus hijas sufran por ello. Es un programa que a las pequeñas les encanta, pero por suerte estarán en la cama para madrugar al día siguiente e ir al colegio.

Enrique Ponce viaja a Madrid para ver a sus hijas sin Ana Soria 

Han pasado tres años y continúan los rumores de la prohibición de Paloma Cuevas a Enrique Ponce. Según varias informaciones, la empresaria habría vetado a Ana Soria. Aunque eso sería totalmente falso. Son las niñas las que por ahora no quieren conocer a la nueva novia de su padre. Lo pasaron muy mal con la ruptura de ambos.

Enrique Ponce lava la cabeza a Ana Soria

Parece que con el tiempo, Paloma Cuevas y Enrique Ponce están intentando mantener una relación cordial por el bien de sus hijas. Además, ambos tendrían el corazón ocupado por otras personas, y es que la cordobesa mantendría una relación con uno de sus grandes amores, Luis Miguel.