Pasan los años, pero ella no deja de sorprendernos. Es Pamela Anderson, mito erótico de un buen puñado de generaciones a partir de los años 90, activista contra el maltrato animal, exnovia de Julian Assange y de un futbolista que jugó en la liga española (y con el que acabó muy mal) y, especialmente, la independentista catalana más internacional. A sus 52 años, Anderson ha hecho absolutamente de todo: desde protagonizar la mítica serie 'Los vigilantes de playa' a vídeos pornográficos muy célebres junto a Tommy Lee, líder de la banda musical Mötley Crüe. También ha experimentado notables cambios físicos, confesándose adicta a las operaciones de estética. Y la mejor prueba la hemos encontrado en redes, donde ha aparecido una instantánea de la actriz y modelo en 1990 que deja boquiabierto.
Ver a Pamela hecha una jovencita con su look californiano, la sonrisa fresca y una mirada 'inocente' sorprende y mucho, si la comparamos con algunas de sus fotografías más icónicas, o incluso con el aspecto que presenta en la actualidad. Han pasado casi 30 años, sí, y ninguno de nosotros soportaría la comparativa: el tiempo pasa inexorablemente para todo el mundo, por mucha cirugía que apliques para contener aquello incontenible. Un inciso: no decimos que ahora esté ni mejor ni peor, sólo señalamos lo que no se puede negar: que está irreconocible.
La entrevista más dura a Pamela Anderson: acoso sexual, Cataluña y algo a lo que se niega contestar #ChesterMan > https://t.co/o7rLp5e6F0 pic.twitter.com/XinUbhLTln
— Cuatro (@cuatro) 3 de diciembre de 2017
Catalonia https://t.co/asNNgd03X4
— Pamela Anderson (@pamfoundation) 6 de noviembre de 2017
Ayer en Bruselas, en el marco de un acto político, tuve un encuentro previsto con @pamfoundation, una mujer q ya en el 2017 salió en defensa d la causa catalana. Que recibimos apoyos|soportes tan inesperados es la prueba q para estar con nuestra causa sólo hace falta una cosa: ser demócrata. pic.twitter.com/ibpghaPdDL
— Toni Comín (@toni_comin) 26 de marzo de 2019
Anderson, defensora acérrima de la causa independentista, y que no calla frente a las injusticias del Gobierno con Catalunya, podría versionar el clásico de Serrat con alegría: "Hace 30 años que tengo 20 años". Eso sí, nadie lo diría.