Telecinco ha caído dentro de un agujero y no sabe como salir adelante. La maldición de Sálvame, cargarse el programa con más éxito, personalidad, repercusión y horas de emisión de la cadena, fue como dejar escapar Messi. Mediaset ha caído de la primera a la tercera opción de audiencia y, lo que es peor, ni avista la salida del túnel. Todo son fracaso, lo más reciente es cancelar, como vaticinó EN Blau, Caiga quien caiga un mes después de estrenarse, por mala audiencia. Un tiro en el pie motivado por una razón: el sesgo político de la matriz, Mediaset, propiedad de Berlusconi socios del gobierno de derecha extrema en Italia. Aquí echaron a Paolo Vasile y pusieron Borja Prado para hacer limpieza de programas de "encarnados y maricones", como se definió Sálvame. La estrategia necesitaba a un aliado y lo confiaron todo en Ana Rosa Quintana, máximo exponente de la derecha sociológica y política en Telecinco. La hicieron todavía más multimillonaria dándole todos los programas antes y después de comer, todo el day time, y el de los fines de semana, aparte de las tardes de Cuatro. Todo por Unicornio, la productora de Quintana. Y todo son fracasos. Ana Rosa ha vuelto a los 69 años a hacer el matinal donde no funciona como antes. Los nervios afloran y este miércoles todavía más al comprobar que la reina emérita de los matinales, como la bautizó con mucha mala sombra Alfons Arús, empieza a chochear. Vídeo:

Ana Rosa Quintana T5
Ana Rosa Quintana T5

Ana Rosa despedía este miércoles su programa para dar paso al siguiente espacio que, como siempre, es también de su productora. Se llama Vamos a ver y lo presenta su mano derecha Joaquín Prat. Pero Ana Rosa, casi septuagenaria, cansada y sin leer el telepromter, da paso a "Ya es mediodía", el programa de su archienemiga Sonsoles Ónega que se despidió de antena hace 2 años. Un programa inexistente que Ana Rosa ha olvidado que ya no se emite. A todo el equipo le ha cogido un escalofrío, Qué dice de Ya es mediodía, corta. Pero el mal ya está hecho. No hay tiempo de rectificar y empieza Vamos a ver. Caras de circunstancias en plató,la reggie y la productora. Ana Rosa empezó su declive el día que firmó con la nueva Telecinco fulminar todo Sálvame y quedárselo todo. Y está jubilándose de la peor manera: en antena, equivocándose, con lapsus y con la sensación que es un tapón que no deja paso a los nuevos. Telecinco ya sabe que tiene un problema. Lo que no tienen es la solución.