Una de las mejores secciones de radio que hay en este país, no nos cansamos de decirlo, la podemos encontrar a menudo en el programa más escuchado de Catalunya, El món a RAC1. Se trata de 'El contenedor', donde los oyentes del programa envían notas de voz exponiendo algún problema por el que están pasando o sencillamente, alguna denuncia escandalosa. En este espacio hemos escuchado denuncias absolutamente aberrantes, como el día que llamó una vecina de 73 años del barrio de Horta de Barcelona, Maria Teresa Bonet, una farmacéutica que recibió la multa más bestia e imposible, por ir a las 9.30 de la mañana supuestamente a... 298 km/h por la Ronda de Dalt. O hace poco, cuando un vecino de Llanars, en el Ripollès, llamó para decir que están apareciendo muertos muchos de los gatos del pueblo, con disparos de perdigones en la cabeza.
A la redacción del programa llegan numerosas denuncias, pero ninguna tan bestia como la de Jordi González, un pastelero de Navarcles que todavía alucina, indignado. Al igual que Basté, los tertulianos del lunes o los oyentes cuando han oído qué ha explicado esta persona, un hombre que hace 16 años que abrió este pequeño negocio de una pastelería pequeña donde trabajan él y su mujer, la pastelería 'Nou Burjons'. Pastelero desde los 17 años, ahora tiene 63, toda una vida, nunca se había encontrado con una cosa similar, y por culpa de la compañía Iberdrola. Para hacernos una idea, Basté quiere saber cuánto puede pagar un negocio como este, en un pueblo. Antes de que la cosa se disparara con respecto al tema de la luz, "unos 700, 800 euros," dice el pastelero. Pero empezaron a llegar facturas "extrañas", algunas más caras, otras más baratas, varias facturas en un mes... Una tendencia que empezó en mayo-junio, cuando entraron en vigor aquello de las franjas horarias. Hasta que recibieron una factura que dijeron 'Ui...', en agosto, de 1.700 euros. Él y la mujer se sorprendieron, pero la pagaron. Al igual que una en septiembre de 2.300.
¿Indignante? Sí. Pero todavía más cuando ya traspasaron todas las líneas rojas con una factura insultante. Ahora hay menos trabajo y encima, les hacen pagar más luz. Pero atención a la factura que les ha llegado en octubre... "9.718 euros"... Silencio en RAC1. Silencio de incredulidad que rompe Mònica Terribas para repetir la cifra, alucinada. Y esta semana les hay llegada otra factura del banco de 698 euros. Y Basté corrobora: "Lo digo por si alguien no se lo quiere creer. Tengo la factura aquí, ¿eh?: os ha llegado una factura, entre una y otra, de 10.400 euros"... Después de llamar a Iberdrola e ir personalmente a quejarse, la compañía les dio una respuesta tanto o más indignante que la cifra astronómica de la factura: "Que lo estudiarán, pero que paguemos, porque si no, nos cortarán la luz". Una respuesta abyecta y miserable. "Tendrían que poner en suspense el cobro mientras lo estudian, ¿no?. Terribas no da crédito. Basté sigue dando cifras: "303 euros de consumo diario"!. Y Terribas repite: "Y dices que la actividad ha sido igual o inferior, ¿verdad"?. Insostenible. "Nos ha subido todo, la harina, la leche, la nata, yo no puedo decirle al cliente, mira, me ha subido la mantequilla, te subo 10 céntimos el cruasán". ¿Qué dice Iberdrola? "Que es un problema de la distribuidora... aquello de ir pasándose la pelota". Terribas: "Podrían dar la cara en Iberdrola, ¿no?. Y Basté remacha el clavo, esperando, como todos, que esta aberración se solucione: "Es que es reír para no llorar"... Y reír o llorar, pero a oscuras. Lamentable.