Días de cambios en Els Matins de TV3. Lídia Heredia dejará el programa la próxima temporada porque se va a hacer de corresponsal de TV3 en Washington. De momento, esta mañana del miércoles ha presentado el programa Pere Bosch. Y durante la emisión se ha producido un hecho lamentable que ha indignado a más de un espectador y espectadora, incluso, a una propia colaboradora del programa, cosa que viene a demostrar que lo que canta Rigoberta Bandini en Ay mamá, aquello de No sé por qué dan tanto miedo nuestras tetas, todavía es, tristemente, bien vigente. Porque en pleno junio del 2022 todavía hay quien se escandaliza porque una mujer salga en televisión como le salga del moño, en este caso, con el escote que le apetezca. Ha visitado el plató de Els Matins Patrícia Plaja, que lleva un año siendo la portavoz del Govern, y que quién le iba a decir que en esta efeméride viviría una censura sin ningún tipo de justificación, y en TV3. Así es como ha ido, el look que ha escogido para la entrevista, y cómo la veían los espectadores al empezar a charlar con el presentador. Como verán, de vez en cuando iban poniendo un letrero con su nombre y cargo:
Tres minutos después, sin embargo, después de un rato viendo y escuchando las respuestas de Plaja, hemos vuelto a ver a la portavoz..., pero de hecho, la hemos visto mucho menos en pantalla. ¿Por qué? Porque un chyron enorme, desproporcionado, con unas dimensiones indisimuladas de su propósito, cubría buena parte de su imagen. De hecho, la cubría tanto que ha llamado la atención de más de una espectadora indignada. Y con razón. Así es como hemos visto a Patrícia Plaja poco después de empezar la entrevista:
¿De verdad, a estas alturas de la película, tenemos que hacer triquiñuelas y utilizar recursos gráficos para intentar disimular el escote de una invitada? Plaja es, aparte de la portavoz del Govern, una mujer que tiene todo el derecho, como todas, solo faltaría, a llevar lo que le apetezca, una elección que, en este caso, era impecable y elegante. Pero como si se hubiera puesto lo primero que hubiera visto por casa. Que haga lo que le rote con su cuerpo y su look. Pero se ve que alguien en TV3 se ha levantado pudoroso, por decirlo suavemente. Alguien ha considerado que era ofensivo ver a Plaja de esta manera. Alguien que ha creído que a los espectadores les sentaria mal verla así mientras estaban desayunando. En definitiva, algún cretino. Penoso que todavía tengamos que ver cosas como estas. No solo eso, sino que la cosa ha ido más allá, tal como dice alguna espectadora que no daba crédito:
Sobre ponerle las agujas para subirle la camiseta, según fuentes de la Generalitat, ha sido una indicación de TV3, no, por supuesto, de la propia Patrícia Plaja. Quien ha ido más allá, quien no se ha mordido la lengua, todo lo contrario, ha sido (cosa que tiene más mérito) una propia colaboradora del programa. La periodista Mayka Navarro, antes de empezar su sección de hoy, no ha querido pasar por alto los hechos y ha querido decir cuatro cosas bien dichas: "Tengo que hacer un pequeño apunte, es que si no, no seré yo", dice al empezar, mientras se mira y se recoloca la camisa que llevaba: "Quiero reivindicar la pechera de la portavoz del Gobierno, Patrícia Plaja, que de manera incomprensible ha sido censurada durante la entrevista con nuestro compañero. Y entonces, yo que también tengo mucha pechera, y con este escote no me lo permite, reivindico la pechera de Patrícia Plaja, la mía y la de todas las mujeres que salimos en esta televisión. A mí sus tetas no me dan ningún miedo, al contrario. Que vista como le dé la gana. Y si tiene pechos, pues escúchame, con todo el respeto por la audiencia, que los enseñe. No entiendo a quién le ha podido dar miedo o cualquier cosa". Maravillosa:
...sin ellas no habría humanidad ni habría belleza, sigue diciendo Rigoberta Bandini sobre los pechos de las mujeres en su himno. Que se lo pongan en bucle a quien ha perpetrado la decisión esta mañana en Els Matins, porque lo que sí ha habido es muy poca vergüenza al querer tapar un escote de manera torpe y penosa. Que Plaja, Navarro y todas las mujeres vistan como quieran cuando vayan por la calle o en una tele. No habrá nunca suficientes letreros que puedan tapar ni hacer frente a su libertad para ir como les dé la real gana.