Mientras 'Gran Hermano' sigue acumulando desgracias, Pau Gasol solo hace que sumar alegrías. Una tras otra: tras su nueva vida de jubilado del deporte, el pívot de Sant Boi de Llobregat disfruta como nunca de su familia. Con su amada Catherine McDonnell está viviendo una segunda juventud y su casa se ha convertido en un nido de amor. Ya tuvieron una primera hija en septiembre del 2020 y ahora Elisabet Gianna podrá presumir de hermanito pequeño.
Por fin llega el sexo masculino en la familia Gasol que, de bien seguro, pretenderá que el nuevo primogénito sea un gran jugador de la NBA. Pau y Cat anunciaron en sus redes sociales con tremenda ilusión que ya esperan su segundo hijo. Lo hicieron en su jardín con confeti azul: celebración por todo lo alto para recordarle a la pequeñita de la casa que en tan solo unos meses serán uno más en casa. Un "Mini Pau" ya está en camino.
Big sister
La que está más contenta de todos parece que es la pequeñaja. Gianna, que se llama así en honor a su bisabuela y a la segunda hija de Kobe Bryant, ya luce una camiseta anunciando que ella es la "Big Sister". De color rosita y con una sonrisa bien risueña la, de momento, única hija de la familia Gasol-McDonnell, posa exultante. No es para menos: está esperando su primer hermanito.
La nueva vida del retirado Pau
Aun y tener mucha pasta, de eso no hay duda, el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes no pierde el tiempo. Sigue dedicado 100% al basket, al deporte y a la salud. Con sus dos fundaciones, la Pau Gasol Academy y la Fundación Gasol, el pívot catalán da apoyo a otros deportistas. Además, tiene otros negocios en el mundo de la immobiliaria y la restauración. Su vivienda, no obstante, está lejos de España. Pau sigue alojado en su casoplón en América, aunque junto a su mujer viaja constantemente a España. Hace pocas semanas, no dudó en ir a comer a un conocido restaurante de Barcelona, en el que compartió una instantánea con su querida Cat. "Qué manera de disfrutar", rotulaba Gasol en 'Disfruta BCN' junto a dos de los chefs que le llegaban a la altura del ombligo.
En su visita no escatimó el tiempo y pasó a ver a su familia al completo, incluido su hermano Marc, que la próxima temporada jugará en la ACB. A sus papás ya les avisó: la próxima vez serán cuatro, no tres. ¡Felicidades, Pau! ¡Orgullo catalán!