La catalana Paula Badosa es una de las tenistas más famosas del panorama internacional. Hace un año llegó a ocupar el número 2 del ranking mundial, parecía llamada a marcar una época. Desgraciadamente las lesiones y los malos resultados han pinchado el globo, y ahora la tenemos en la posición 29 del WTA. Un presente deportivo más bien discreto, todo lo contrario a lo que pasa con la deportista fuera de las pistas. Badosa interesa: primero por crear polémicas, como sus famosas frases contra el catalán. Después por un aspecto más íntimo, su vida amorosa. En su currículum encontramos a VIPS como David Broncano o, el más reciente, el actor cubano Juan Betancourt. Se separaron hace relativamente poco tras un año y medio de relación. Un golpe que no acabó de digerir bien del todo, le rompieron el corazón.
Sin embargo Paula se está reponiendo a gran velocidad. O cuando menos este es el rumor que circula en redes sociales, alimentado por una serie de fotos, de gestos y de movimientos que te dejan de piedra. Tiene una nueva ilusión, un colega de profesión que está considerado como una de las grandes estrellas del circuito. Ocupa actualmente el número 5 de la ATP, el griego Stefanos Tsitsipas. Hace unos días quedaba eliminado de Roland Garros a manos de Carlos Alcaraz, su bestia negra. No queremos ser malos, pero parecería que se está contagiando de la mala racha de Paula.
Paula Badosa y Stefanos Tsitsipas, movimientos más que sospechosos
Todo comienza cuando los usuarios de la plataforma de streaming musical Spotify quedaron sorprendidos al ver que los tenistas habían cambiado sus fotografías respectivas de perfil, pasando a exhibir una instantánea conjunta en actitud divertida, cómplice y afectuosa. Aquello encendió la mecha de una investigación masiva por parte de los internautas, con un resultado bastante significativo. De repente apareciían las imágenes de una Badosa escondida entre el público del torneo de Roland Garros siguiendo la victoria de Stefanos contra Sebastian Ofner. La bola de nieve empezaba a hacerse grande. Cada detalle cuenta, como en un partido de tenis.
Los tenistas están muy compenetrados, aquí hay lío
Los fisgones con más vista han detectado, además, un pequeño cambio en la forma de celebrar los puntos de Tsitsipas en París. Cuando suma alguno importante uno de sus dedos apunta a la sien, un gesto que habla de concentración, de fortaleza mental. ¿Por qué es llamativo? Pues porque es exactamente lo mismo que hace Badosa sobre las pistas, un gesto muy característico, personal y supuestamente intransferible. Bueno, ahora es patrimonio compartido con su amigo especial, con quien hay una sintonía más que evidente. Las fotos son claras. Ahora bien, ninguno de los dos confirman ni desmienten nada, solo demuestran que la situación les divierte. Paula escribe "esperando el bonus de Spotify al respecto", citando la filial española del patrocinador del Barça. El griego le sigue el juego y barre para casa: "¿Lo enfocamos a nivel regional?", dice, haciendo referencia a la sucursal helena de la plataforma. El cachondeo es sospechoso.
Aquí hay lío, juego, set y partido. Seguiremos atentos el intercambio de golpes.