La cantante mexicana Paulina Rubio está pagando caro su vídeo de "apoyo" a la lucha contra el coronavirus. Una grabación que ha arrasado las redes por las sospechas sobre su estado mientras lo grababa. Rubio no sólo ofrecía un discurso absurdo ("yo me quedo en causa"), sino que hacía gestos extraños y que hacían pensar que estaba consumiendo alguna sustancia tóxica. La cuestión ha pasado de rumor a evidencia contrastada, al menos si atendemos a las palabras del juez que se ocupa de la batalla legal por la custodia de su hijo contra el celebrity español Colate Vallejo-Nágera.
Colate ha presentado el vídeo como prueba de que la madre está incapacitada para hacerse cargo del menor, y el tribunal ha comprado (a medias) la teoría. Reconoce que "parece que alguien se está intoxicando en el vídeo. Baja la cabeza dos veces, inhalando sustancias (sniffing) y rascándose la nariz", pero deja la custodia cómo estaba, a pesar de la recomendacióm de que la próxima vez que esté con el niño, se abstenga de intoxicarse. El fragmento, publicado por Telemundo, es demoledor.
Paulina ha contraatacado contra el ex de 'Supervivientes' y hermano de la 'Masterchef', a quien acusa de querer fama, dinero y notoriedad a su costa. Eso sí, públicamente ha quedado hundida.