Rosa Maria Mateo ya ha tomado posesión del cargo al frente de TVE y empiezan a notarse los cambios. Cárdenas no será la única víctima de la purga pepera que está preparándose en la TV pública. El locutor quiere dar batalla judicial con el contrato que le firmó in extremis la anterior cúpula del ente público desfirmada por el partido de Pablo Casado. Pero no sólo se notará el aire fresco en los programas de entretenimiento. En los informativos es donde hay más urgencia. Han sido muchos meses de trabajadores de TVE protestante por las presiones para esconder informaciones de corrupción del PP y ahora hay que volver a una TV neutral donde todos los políticos corruptos abran el Telediario. Segunda cara de TVE que echan: Pedro Carreño. Así se despidió en su último telediario.
La despedida de Pedro Carreño del @telediario_tve sonó a despedida . Tiempos de cambios en @rtve @alvaromenlon pic.twitter.com/0ZAMYTeE08
— Sebas Maspons (@MaspiTV) 30 de julio de 2018
Carreño, fiel a su talante engolado y del siglo XVII. Se dejó barba en su eterna búsqueda por parecer moderno, pero una mona de seda sigue siendo una mona. Fue puesto a dedo por el PP cuando Oriol Nolis, el catalán que lo precedía en el TD fin de semana informó de las manifestaciones del 11 de septiembre sin el sesgo que quería a la entonces todopoderosa María Dolres de Cospedal, su "madrina". Nolis fue confinado a Sant Cugat en TVE Catalunya y Carreño pasó de jefe de prensa del Banco Popular, la entidad de ahorros arruinada del Opus Dei, a editor de TD. Su catolicismo le hizo decidir que moriría matando. La última noticia de su Telediario fue indigna de una TV pública.
Una procesión de un pueblo de Pontevedra donde desfilan personas vivas dentro de ataúdes abiertos para pedir un milagro a Santa Marta: una abuela con nieta enferma, un hombre en silla de ruedas... Se dio cancha a personas que creen en milagros: "Fe y devoción atraen en miles de personas" (voz en off) y una asistente: "Tengo que pedir a la santa por gente que tuvo un cáncer y se curó". Toda una declaración de principios de Carreño, que relegó la manifestación independentista de miles de personas titulándolo "Desafío a la ley". La emitió después de una manifestación antiabortista y una por el derecho a la caza y declaraciones de Cospedal desde Toledo.
Y como cree que el Telediario es suyo, Pedro Carreño, originario de Toledo, acaba su último TD con una imagen de Toledo diciendo "Gracias por su respeto". Le debía hablar a María Dolores de Cospedal.