El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha iniciado ya la ronda de contactos con los dirigentes de todos los partidos políticos para intentar formar gobierno, después de la victoria del PSOE en las elecciones del 28-A. Después del encuentro de ayer con Pablo Casado, hoy le ha llegado el turno al líder de Ciudadanos, y tal y como hizo el lunes con el presidente del PP, Sánchez ha publicado en Instagram una fotografía con Albert Rivera en la Moncloa, justo antes de la reunión.
Pero los votantes socialistas no se fían ni un pelo de las intenciones del presidente, y tan pronto como ha colgado la foto en la red, los seguidores de Sánchez se han echado en tromba para recordarle lo mismo que le gritaban la noche de las elecciones: "¡Con Rivera, NO!". Los electores temen que el presidente español se sienta tentado revalidar el pacto del 2016 con Ciudadanos, y le exigen que se desmarque claramente. Más todavía después de una campaña en la que el partido naranja se ha quitado definitivamente la careta, marcando perfil ultranacionalista para competir por el mismo electorado que el PP y Vox, haciendo propuestas para incrementar la represión en Catalunya.
GTRES
Los votantes de izquierdas no quieren ver a Albert Rivera ni en pintura, ni en una foto de Instagram. Durante la campaña, el líder de Ciudadanos pensaba que sería el nuevo inquilino de la Moncloa pero, si depende de los simpatizantes del PSOE, lo único que verá de la residencia oficial del presidente español es la puerta de salida.