Las últimas horas están siendo dramáticas en todo el país con respecto a los incendios que queman buena parte del territorio. En Catalunya, todas las alertas están puestas en lo que pasa en el Pont de Vilomara, en el Bages, o en el bosque de Àger, en la comarca de la Noguera. En España la situación también es preocupante en diferentes puntos de la geografía. Por ejemplo, en Extremadura, donde un incendio ha afectado al Parque Nacional de Monfragüe y ha calcinado ya más de 3.000 hectáreas. Hasta allí ha ido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, concretamente, hasta la localidad de la zona donde se originó todo, Casas de Miravete.

Pedro Sánchez / Efe

Una vez allí, Sánchez se ha retratado, ha permitido que la agencia Efe le hiciera una foto y la distribuyera posteriormente. Una foto donde se le ve con el rictus serio, como no podía ser de otra manera, con los brazos cruzados y mirada al infinito. Una imagen que ha chirriado a buena parte de la ciudadanía, básicamente, por la conveniencia o la pertinencia de hacerse una foto así en un momento como este. ¿Era necesario? Se preguntan muchos. Respuestas, la mayoría, en sentido negativo. 'No hacía falta', es la conclusión a la que ha llegado la mayoría. Claro está que más allá de la idoneidad o no de la imagen, otro detalle de esta es lo que ha hecho enloquecer a la red. Salta a la vista a qué nos referimos. Miren los tejanos del presidente del Gobierno... Mientras Sánchez mira hacia el infinito con cara de intenso, no se sabe exactamente qué, que está dentro de los pantalones, mira hacia otro lado. La red, desatada:

En su visita, Sánchez ha advertido de que "no podemos desviarnos de nuestro compromiso con la mitigación y la adaptación al cambio climático. Todas estas olas de incendios tienen detrás olas de calor provocadas por la emergencia climática que está viviendo el planeta". Pero estas palabras, importantes, han quedado difuminadas ya que el presidente del Gobierno ha generado, sin proponérselo, un efecto contrario al que pretendía: nadie mirando su cara de preocupación y los terrenos calcinados y todo el mundo mirando abajo a la izquierda.