"Me hubiera gustado mucho más ver ahí a Mónica Naranjo, porque si la hubieran llevado a ella y la escuchan en todo Estados Unidos, se les caen las bragas. Pero claro, eso lo paga la discográfica". Es la penúltima perla que ha soltado por la boca. ¿La última? Del mismo nivel: "No me mata su música. A ella la veo como a la típica niña andaluza morena con ojos marrones, que no es que sea super amazing... Y tampoco tiene la voz de Marta Sánchez". Esta ella a la que hace referencia es Rosalía.
Y la persona que dice pestes de ella y a la que le hubiera gustado más ver triunfar en los MTV a Mónica Naranjo o Marta Sánchez que a la cantante de Sant Esteve Sesrovires es a la Pelopony. La artista de variedades, carne de cañón de la fauna telecinquera y uno de los personajes más irreverentes del chismorreo de los programas de Vasile hacía tiempo que estaba desaparecida en combate. Pero ha vuelto con la lengua más afilada que nunca.
Este inclasificable personaje saltó a la fama después de ir algunos días a Sálvame y de su paso por Supervivientes, donde no paraba de llorar y donde la echaron a la calle a las primeras de cambio. También lloraba, y mucho, en un vídeo que se hizo viral y que colgó ella misma en las redes, explicando desconsolada que su novio la había dejado después de llevarse a una amante a la misma cama dónde ella dormía cada día. Un drama de exposición pública que provocaba vergüenza ajena:
La Pelopony también se ha hecho un lugar, si es que a eso se le puede decir hacerse un lugar, debido a su nombre artístico y a su peculiar look, con la melena a menudo larga hasta la cintura y de colores muy llamativos. Desde su irrupción, que los ponys ya no parecen unos animales tan adorables. El caso es que nuevamente ha dejado boquiabierta a la red con una foto que ella misma ha colgado y donde se la ve irreconocible con sólo 16 años, cuando todavía no había empezado sus visitas por los platós de Telecinco y donde nada hacía pensar que aquella chica morena se convertiría en uno de los personajes más deslenguados de Telecinco.
Como ella mismo escribe en el texto que acompaña la foto: "2003-2019. Vesindad v.s Putería"... Como diría Jep Cabestany: "No hay más preguntas, señorita".