+57, la canción que fue catalogada como el próximo “himno colombiano”, terminó siendo todo lo contrario. Dicho tema, que cuenta con las participaciones de Karol G, Maluma, Feid, J Balvin, Blessed, Ryan Castro, DFZM y bajo la producción de Ovy On The Drums, ha traído una ola de críticas desde su estreno en todas las plataformas digitales. Para muchos, esta melodía no solo ha transgredido un límite moral, sino que también suscita interrogantes acerca de la obligación de los artistas en la sociedad.

La crítica de Nicolás Maduro a “+57”

Desde el lanzamiento del tema hasta la actualidad, +57 se ha transformado en un asunto de gran polémica y controversia, obteniendo críticas de políticos, entidades e incluso de mandatarios como Nicolás Maduro. El presidente de Venezuela no dudó en compartir su opinión de +57: “No me meto como Presidente, pero tengo que hablar como abuelo porque me parece una basura esa canción, tanto la letra como el video”, expresó Maduro. Para el mandatario, +57 no solo fomenta una percepción incorrecta de la mujer, sino que también fomenta el uso de drogas y sexualiza a los jóvenes. “Ese tipo de canciones son escuchadas por niños y niñas. ¿Qué tipo de mensaje estamos enviando a las nuevas generaciones?”, añadió. Estas palabras no fueron ignoradas en lo absoluto, dado que Nicolás Maduro pocas veces habla sobre asuntos relacionados con la industria musical. 

Debate sobre la letra y la respuesta de Karol G

El verso que causó más polémica es el que dice: “Una mamacita desde los fourteen, entra a la disco y se le siente el ki”. Dicho fragmento fue catalogado por fomentar la sexualización de menores de edad, generando una avalancha de críticas tanto en redes sociales como en medios de comunicación. Ante la presión masiva por parte de los internautas, se modificó la letra, pasando la edad indicada de cuatro a ocho años. No obstante, esto no logró mitigar las críticas. Karol G, afectada por la situación, recurrió a sus redes sociales para pedir perdón. En un mensaje compartido en su Instagram, la cantante manifestó. “Desafortunadamente, se sacó de contexto la letra de una canción con la que buscaba celebrar la unión entre artistas colombianos… Me doy cuenta de que todavía tengo mucho que aprender y me disculpo de corazón”. 

Aunque su objetivo era tranquilizar las aguas, muchos cuestionaban si este tipo de fallos son tolerables proveniente de una artista de su rango. Adicionalmente, entidades como el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) también expresaron su rechazo, indicando que canciones como +57 "intensifican la sexualización durante la infancia". Este episodio propone cuestionamientos profundos acerca del papel de la música en la sociedad. Aunque Karol G intentaba unir a los artistas colombianos y animar a bailar a su audiencia, el mensaje que difundió ha causado un efecto adverso que va más allá del sector artístico. Esta polémica, más allá de las disculpas, es un recordatorio de que, en un mundo tan interconectado, cada palabra y cada mensaje son relevantes.