En el PP son especialistas en decir sandeces sobre Catalunya para recibir cuatro votos de los hiperventilados de las españas y para que sus simpatizantes les den golpecitos en la espalda diciendo qué bien que hablan y bla, bla, bla. Hace un tiempo, el especialista máximo del partido de la gaviota en decir tonterías era Pablo Casado, autor de algunas de las frases más vergonzosas sobre una realidad que él aseguraba que se vivía en Catalunya que sólo la encontrábamos en su imaginación. Pero nada más lejos de la realidad. Los políticos del PP son especialistas en decirla de padre y muy señor mío cuando se ponen Catalunya en la boca, dando lecciones de chichinabo y haciendo construcciones lingüísticas esperpénticas. Y ahora le ha tocado el papel de bufón a Alberto Núñez Feijóo.
El presidente del PP ha estado por tierras catalanas donde (no se podía saber) se ha mostrado en contra de una hipotética reforma del delito de sedición y ha afirmado que, en caso de producirse, supondría "el atentado mayor contra la igualdad y la libertad en España". En la clausura del 13.º Congreso Provincial del PP en Lleida este domingo, el líder de los populares ha reivindicado que "todos tenemos que ser iguales ante la ley". El líder del PP ha sostenido que ni republicanos ni socialistas "defienden los intereses de Catalunya", y ha reivindicado su partido como el único que hará que se cumpla "el Estatuto y la Constitución". Por eso, ha hecho un llamamiento a los "huérfanos del constitucionalismo" para que se sumen al proyecto del Partido Popular. En su exposición sobre Catalunya ha utilizado una de aquellas metáforas marca de la casa que tiempo atrás utilizó Rajoy, una de aquellas que quizás en su cabeza suenan muy bien, pero que cuando la oyen los demás, son grotescas.
Una metáfora sobre amor paterno-filial de traca: "Creemos en Cataluña. Cuando un hijo dice que el que más quiere a su padre es él, el resto de la familia no debe consentirlo, porque a un padre y a una madre lo quieren sus hijos y nadie de la familia tiene derecho a excluir a una parte de los hijos en contra de sus padres". Chim pum. Quien ha escuchado esta estupidez ha sido Peyu. El copresentador de El búnquer de Catalunya Ràdio no se ha mordido la lengua, como nunca hace, y le ha dicho cuatro cosas bien dichas a Feijóo. El cómico y presentador catalán ha destrozado al popular, diciendo que "Si quiere continuar con la metáfora idiota (poned la coma donde queráis) cuando un hijo quiere marcharse de casa no se lo tiene que retener a no sé que consideres que el hijo no se puede valer por sí mismo y a ti te interese mantenerlo para gestionarle la pasta de la paga". Impecable:
No tardaremos en oír a alguien del PP diciendo otra tontería sobre Catalunya.