Ortega Cano cree que es como el vino, con los años mejora. Pero diríamos que al torero le ocurre todo el contrario, con los años está más caducado. Sin embargo, él no se cansa de torear frente todas las polémicas que le presenta la vida. Al exmarido de Ana María Aldón le gustaría ser recordado por su dominio en las plazas de toros, lástima que su historial como personaje de televisión nos ha dado más jugo. Mucho más jugo. Y bien, se lo ha buscado el solito. Condenado en la prisión para conducir bajo los efectos del alcohol, alborotos de todo tipo con su pasado como marido de Rocío Jurado y ahora, está endeudado hasta el cuello. Un desastre en persona, pero él intenta arreglarlo. Al ver una cámara se crece y se exalta, quiere lavar su imagen y siempre acababa resbalando. Esta vez ha vuelto a dar la nota.

José Ortega Cano tan pronto se pelea con la prensa como hace las paces, todo se depende del día. La última vez que se les encontró delante de casa, los dedicaba un "Iros a tomar por culo de aquí" y se quedaba tan a gusto. Al día siguiente aparecía cabizbajo, con una vergüenza que no le dejaba ni levantar la cabeza. Después de unos días de reflexión y descanso, el torero ha sido invitado al aniversario de Victoriano Valencia, el padre de Paloma Cuevas. Extrañamente, se acercaba a la prensa para responder las preguntas pertinentes, pero no sabemos si tenía la cabeza demasiado en su sitio, le costaba construir las frases al dar las siguientes declaraciones: "Yo he conocido a mucha gente, pero no con tanto cariño como les siento a ellos, son como de la familia"  Si aquí ya vemos que sus palabras se tambaleaban, atentos cuando le preguntan por Paloma Cuevas y su relación con el cantante Luis Miguel. 

La prensa le preguntaba por la relación entre la socialité española y el cantante, cuando su respuesta los ha dejado desconcertados"¿Vamos a ir de boda? Hombre, yo no sé cómo va la cosa, pero sí, le voy a pedir una entrada a Juan Miguel. A Luis Miguel, perdón” No sabía ni de quién le estaban hablando. Pronto se da cuenta del error cuando la prensa lo corrige. En momentos como estos es cuando se tendría que dar cuenta de que la edad le pesa para seguir dominando las plazas de toros. Por otra parte, la prensa no podía evitar preguntarle por el próximo aniversario de la muerte de Rocío Jurado, que se celebrará con el estreno de un musical homenajeando su trayectoria. Otra duda que se le hacía bola, el torero no sabía que responder porque con este tema también tiene frentes abiertos. No puede poner el hocico en ningún sitio.

Paralelamente a las palabras del exmarido, Rocío Carrasco, la hija de la cantante difunta, inauguraba ROCÍO JURADO, el musical que volvía en la capital madrileña para los días 28, 29 y 30 de junio. Un homenaje donde el torero seguro que no estará invitado. José Ortega Cano a sus 70 años no se pierde ninguno ni una, pero todas las penurias de su colección no lo dejan estar en paz en ningún sitio. Lo vemos posar delante de la cámara haciendo un gesto juvenil con los dedos, se ponía a bailar en medio de una celebración y protagonizaba la dedicatoria más surrealista de la historia con su "Mi semen es de fuerza" No entendemos demasiado de tauromaquia, pero está claro que su especialidad es encabezar a los titulares con todas las pifias.