Pilar Rahola advirtió el lunes en TV3 que no volvería al programa esta semana. El martes presentaba su libro S.O.S. cristians que promete ser uno de los best sellers de Sant Jordi. Lo hacía con el tiempo justo para coger un avión a Polonia y hacer la Marcha por la Vida, una concentración de más de diez mil judíos que han recorrido a pie los km que separan Birkenau del campo de concentración más conocido de los nazis: Auschwitz. Un raudal de emociones que ha querido transmitir con imágenes tan impactantes como estas:
Cabello humano. Miles de kilos de cabello de los judios muertos en las cámaras de gas, con el que los nazis hacían negocio.
— Pilar Rahola (@RaholaOficial) 12 de abril de 2018
Industria de exterminio. #MarchaPorLaVida pic.twitter.com/6Nl2ucNUgO
Ver una foto de los experimentos de Mengele, mientras estamos en Auschwitz supera todo dolor. #marchaporlavida pic.twitter.com/IchIv8CTW1
— Pilar Rahola (@RaholaOficial) 12 de abril de 2018
Las cámaras de gas..., derrotadas! pic.twitter.com/FF9vvYXGK9
— Pilar Rahola (@RaholaOficial) 12 de abril de 2018
No es la primera vez que la escritora y periodista visita este campo de concentración convertido en museo pero en esta ocasión ha ido con decenas de miles de personas judías. Rahola no es judía, y sin embargo se ha tenido que reprimir las lágrimas. Algunos desaprensivos han aprovechado twitter para comparar nazismo e independentismo pero no merecen ni que se reproduzcan sus tuits. Ante la ignominia de 6 millones de judíos exterminados sólo se puede intentar mantener la serenidad y recordar.
Ha visitado el campo de la mano de miles de judíos, de la delegació presidencial (con ambos presidentes, de Polonia e Israel), decenas de embajadores, el jefe de los servicios secretos de Israel, el Mossad, y el embajador de Israel en la ONU, Danny Danon:
Pilar Rahola sosteniendo la bandera del Estado de Israel y transmitiendo toda la emoción de un lugar tan significativo. Ningún tuit puede enturbiar lo que representa Auschwitz. Que no se repita y que no se olvide.