Sorpresa en TV3. Este lunes y martes los millares de espectadores que siguen a Pilar Rahola en el programa Tot es mou a las ocho de la noche ya no la encontrarán. No parece censura, es que lo han cambiado de horario. Lo emiten a una hora mucho peor, de sobremesa, sobre las cuatro y media de la tarde. Un horario mucho menos influyente.
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Nueva decisión cuestionable en TV3. El programa de Helena Garcia Melero envía a la hora de la siesta (las 16:49) la sección La Tribuna, el análisis político de los opinadores como Pilar Rahola, Josep Cuní o Jaume Barberà. La decisión, si no es política ya que la opinión de Rahola es muy influyente en el independentismo, sólo puede obedecer a una cuestión de audiencia. El programa de tarde ha perdido mucho fuelle.
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La semana pasada perdió cada día con Sálvame. Un ejemplo martes pasado. El cotilleo de Telecinco hace casi el triple de audiencia (20,5%) que Melero y Marquina que caen a un flojo 8,3%. En la gráfica de audiencia se observa que el programa de TV3 empieza muy bien, decrece en número de espectadores cuando empieza la parte frívola del programa, la que presenta Lluís Marquina y remonta cuando entra Rahola.
Audiencias Catalunya, el martes 30 de junio (fuente Kantar)
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El programa se va de vacaciones el 17 de julio y están haciendo pruebas a ver cómo funciona el nuevo horario de la sección estrella del programa, la que está ubicada estratégicamente a las 8 para dejar en alto el paso a Toni Soler y hacer líder el Telenotícies vespre. Una buena estrategia que tiene un agujero negro: la parte de Marquina con colaboradores irrelevantes como Elisenda Pineda. Quim Monzó ya advirtió que le daba asco: "Os tendrían que escupir, ignorantes". Según Kantar Media la parte frívola del Tot es mou hace perder a TV3 unos 100 mil espectadores.
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Al programa, que según reveló en exclusiva En Blau vio dimitir a la anterior directora, le interesa salvar la audiencia en una época que Vicent Sanchis se tiene que cargar programas que no puede pagar. Da pena que no siga Polònia o el culebrón y se mantenga según qué. En septiembre habrá que tomar mejores decisiones que enviar la sección de más éxito del programa a las 4 de la tarde. Y cortar cabezas.