No llegan buenas noticias desde Luxemburgo. El exilio catalán ha perdido la inmunidad parlamentaria, el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) ha denegado los recursos de Carles Puigdemont, Clara Ponsatí y Toni Comín. La decisión supone encontrar agua en medio del desierto para la Justicia española, obsesionada con el trofeo del expresidente desde hace años. El juez Llarena, sin embargo, no debería cantar victoria.
Se trata de una decisión a la que se puede presentar recurso, obviamente, y la decisión final no dependerá de aquellos que esta mañana han dictado su "sentencia", no. El caso cambiará de manos e irá donde realmente se toman las decisiones jurídicas definitivas, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). Un escenario que, como recuerda Pilar Rahola en un nuevo vídeo de su canal 'Palabra de Rahola', ha sido mucho más favorable a los intereses de los independentistas catalanes. Hay partido.
"No es buena notícia, pero aquí no acaba nada": Pilar Rahola analiza la decisión del Tribunal General de la Unión Europea
El análisis de la escritora no tapa la realidad, ni mucho menos. "Sin duda es una pésima noticia, es una mala noticia. Lo es, no hace falta decir que para el exilio catalán, lo es para el independentismo y lo es para los derechos fundamentales de cualquier ciudadano de Catalunya". Ahora bien, no se ha sorprendido nada de nada. Era lo más previsible, porque en el TGUE "el exilio catalán no ha ganado nunca. Siempre hemos ganado en el TJUE". La diferencia entre ambas instancias es que una "es la primera instancia", y la otra "es el tribunal de Casación, es la que hace jurisprudencia. El primero es normativista y no entra nunca en el fondo. El Tribunal de Justicia entra en el fondo y hemos tenido sentencias muy y muy favorables: la úlitma de enorme importancia, cuando decía abiertamente que se podían renunciar a dar las euroórdenes cuando un grupo objetivamente identificable puede ver vulnerados sus derechos. Estamos hablando, por lo tanto, de que los eurodiputados representan a un grupo de personas muy importante, que además tienen unos derechos fundamentales que están siendo puestos en cuestión". En consecuencia, la tercera gran pregunta tiene respuesta: "¿Aquí acaba todo? Aquí no acaba nada y todo continúa".
¿Qué pasará a partir de ahora? Rahola, esperanzada
Pilar prevé lo que pasará a partir de ahora. "La primera, muy probablemente Llarena reactivará las euroórdenes porque, además Llarena hoy está pletórico, con el póster del Puigdemont diciendo "ya lo tengo". Es evidente que con toda probabilidad, si no las tiene ya preparadas y ya lo ha hecho, las hará inmediatamente. Pero también inmediatamente los abogados del presidente Puigdemont pedirán al Tribunal de Justicia de la Unión Europea las medidas cautelares para mantener la inmunidad y que no sean detenidos. Tercera cosa: por mucho que envíe una euroorden, como ahora plantea delitos diferentes porque con el cambio del Código Penal los delitos han mutado, y ya no pide coger a Puigdemont por sedición sino por malversación agravada y delitos públicos, lo que sostienen los abogados es que se tiene que pedir la euroorden por un delito concreto". Un nuevo suplicatorio y un nuevo recorrido. Y veremos qué pasa. Que vendan la piel del oso, es pronto.
Rahola lo tiene claro: "La partida es larguísima y tenemos que recordar que allí donde se hace jurisprudencia, que es el TJUE, donde nos veremos finalmente definitivamente la batalla final, las cosas han acostumbrado a ir mucho mejor. De manera que todos tranquilos". No será "una gran noticia, pero en todo caso, hoy estamos donde ya estábamos: con un Llarena persiguiendo al exilio catalán, con unos derechos fundamentales que están siendo cuestionados, con un Tribunal General que nunca nos da la razón". Pero "hay un recorrido hacia el Tribunal de Justicia, que es donde puede haber mejores noticias. Por lo tanto, persistir, resistir y luchar. Todo continúa".