Pilar Rubio y Sergio Ramos se han mudado con toda la familia en París a raíz del fichaje del futbolista por el París Saint Germain de Messi, Mbappé, Neymar y compañía. El traslado ha puesto la vida de la televisiva patas arriba, teniendo que reorganizar su agenda y dejar de lado algunos compromisos profesionales importantes, como su participación en el programa 'El Hormiguero' de Pablo Motos. Han pasado meses desde su llegada a la capital de Francia y todavía no hemos visto al excapitán del Real Madrid sobre el césped, ya que no se recupera de sus continuas lesiones. Un fichaje muy caro y muy poco rentable para el club del emir de Qatar, a pesar de que eso no importe nada en los despachos de sus dirigentes. Tienen 'el dinero por castigo', vaya. Ahora parece que el de Camas empieza a ver el final del túnel, y su reaparición sería inminente. Pero de momento, nada de nada.
En cambio, su mujer y madre de sus cuatro hijos no para de trabajar. Y en tres ciudades diferentes al mismo tiempo. Madrid, Barcelona y París. El ritmo es infernal. Pero tiene gancho, las marcas la demandan y ella aprovecha la ola al máximo. Rubio es una industria por sí misma, especializada en el mundo de la moda y del fitness. Está en plena forma y parece que el público no se agota nunca. Ella, por su parte, siempre encuentra la manera de sorprenderle. A veces de forma no demasiado positiva, en otras con mucho más acierto
Pilar Rubio no para de trabajar / @pilarrubio
Pilar Rubio enfadada durante la despedida de Sergio Ramos del Real Madrid / La Sexta
La madrileña ha dejado el centro de París con un palmo de narices durante la grabación de una campaña publicitaria. Un rodaje en lo que la hemos podido ver de una forma muy sorprendente: vistiendo únicamente un albornoz blanco mientras pasea por el lujoso e impresionante Palais Garnier, conocido como la Ópera de París. Sin ningún tipo de dudas, uno de los edificios más característicos de la bellísima ciudad del Sena, un elemento inconfundible de su paisaje urbano. Una arquitectura imponente que durante esta mañana añadía la guinda de tener a Rubio en sus escaleras con este 'look' tan impactante.
Ella, consciente de que se trata de una ocasión única, ha inmortalizado el momento en un story de Instagram mientras bromeaba con la escena: "¡Nada, paseando por París! A mí es que me gusta ir en albornoz por la calle, es mucho más cómodo". Rápidamente, eso sí, explica el secreto: "no, que estamos trabajando". Hace un gesto con la mano, la cámara empieza a girar y descubrimos el enorme equipo que la acompaña en esta pequeña aventura. Un montón de técnicos, operadores, asesores, etcétera. Queda más que claro que, hoy en día, Pilar Rubio es mucho más estrella que su marido. Cuando menos, la han visto trabajar mucho más que al central.
Pilar Rubio en albornoz en la Ópera de París / @pilarrubio
El vídeo de Pilar Rubio en albornoz en el centro de París / @pilarrubio
Ramos ganará millones de petrodólares entrenando a la constelación de estrellas del Parque de los Príncipes, pero la que suda la camiseta, y el albornoz, y lo que haga falta, es Pilar. Ella sí que tiene mérito.