Por fin. Finalmente, después de muchos días de fiesta, volvemos a la normalidad. Después de comidas familiares interminables, de polvorones, pavos, barquillos, cava, regalos, desfiles, sorteos de lotería y colas eternas en las tiendas, este martes 7 de enero volvemos al día a día más o menos habitual, aunque la magnitud del momento presente llegará en su plenitud mañana miércoles, ya que hoy todavía muchos niños no van a la escuela. Una de las mejores cosas que hemos tenido estos días de fiesta, quien los haya tenido, ha sido que todo y que la programación de radios y tele ha variado, el que se ha mantenido fiel a su cita de los lunes por la noche ha sido El Foraster de Quim Masferrer. El maravilloso programa donde el presentador recorre nuestro precioso país y va conociendo nueva buena gente entre los vecinos de los diferentes pueblecitos que visita, no ha cerrado por vacaciones de Navidad, y ha seguido ofreciendo programa tanto el lunes 23 de diciembre antes de la Nochebuena, como el lunes 30 de diciembre antes de acabar el año, como este pasado lunes 6 de enero, el primer El Foraster de este 2025.

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Quim Masferrer y Lina, abuela de Gerard Piqué / TV3

Para estrenar año nuevo, el bueno de Quim ha cogido el coche y ha ido hasta Sant Guim de Freixenet, a la Segarra, un pueblo que algunos vecinos han establecido que es como un pueblo "del oeste", de aquel de las películas de cowboys, ya que empezó a tomar forma el día que el tren llegó hasta allí. En torno a la vía, como si fuera el salvaje oeste de las pelis de Hollywood, se fueron creando calles hasta llegar a lo que se ha convertido en el pueblo hoy en día.

Un pueblo que no está demasiado acostumbrado a la presencia de las cámaras. De hecho, solo llegar, ya le han dejado claro al foraster que allí parecía más forastero que nunca, en un pueblo donde hasta ahora, la tele solo había ido un día que fue, atención al dato random, el expresidente de España José María Aznar, o para hacer seguimiento de las visitas de Gerard Piqué a su abuela Lina, que es de allí. Como dice Quim, allí han ido las cámaras por él, por Piqué y por Aznar... Una analogía deliciosa con El bueno, el feo y el malo en un pueblo donde también encontró al comando casteller de Sant Guim y a su doble:

Como siempre, hubo un momento que nos tocó especialmente la fibra. En el caso de ayer, dos momentos. El primero, cuando conoció a Núria, santguimenca de toda la vida, que decidió hacer un cambio radical de vida con su marido David. Él es cocinero y ella enfermera de quirófano, y ahora tienen una carnicería. ¿A qué respondió este cambio?... "Somos unos cuantos en casa, entre David y yo y todos los chiquillos...". "¿Cuántos hijos tenéis?", quiere saber Masferrer. "...Cinco... cuatro", dice ella... "Tenemos a Mariona, Biel, Caterina, Violeta que ya no está y el pequeño Quim"... Y es que Violeta murió antes de nacer: "Violeta está muy presente en casa, es una más. Era intrauterina. Es un luto perinatal. Estaba de 25 semanas". Como dice Núria, a menudo a los bebés nonatos que mueren, es como si no existieran. Y ella quiere reivindicar que no es así: "Registralmente no existe. Pero sí que existe. Es nuestra hija. Quiero explicarlo, no me lo dejo dentro, aunque cuesta y tiemblo por dentro cuando lo explico, pero se tiene que dar visibilidad a los lutos perinatales":

Tiene toda la razón. Un momento conmovedor. La vida es así, a menudo nos sobrecoge con casos como el de Violeta... o en la otra parte de la balanza. Porque de una muerte sentida de un nonato pasamos a conocer a una mujer que tiene ni más ni menos que 100 años. ¿Quién? Lina, abuela de Gerard Piqué, a quien Quim fue a conocer a la residencia. Una abuela entrañable, centenaria, "quiero tanto a mi familia... Me iré de este mundo contenta de haber tenido estos hijos tan guapos, estos nietos... todos. Son muy buena gente, como aquel que sale 'en la película', que pienso que es usted". Sensacional, Lina revela que cuando viene su célebre nieto, "tenemos que cerrar la puerta enseguida, porque si no, esto se llena de mucha gente, porque Gerard es un trozo de pan, ya le digo yo":

Lina, maravillosa.