Como una hoja movida por el viento, así creen en ‘Sálvame’ que es Rosa Benito. La colaboradora ha comentado durante este último año el documental de Rocío Carrasco desde su silla en el programa de Sonsoles Ónega. A veces se ha mostrado en contra de las palabras de la hija de la más grande y en otras no ha dudado en apoyarla a muerte. Sin embargo, la mujer de Fidel Albiac la ha definido como una veleta. Era una "un poco veleta" y que se mueve "según le viene el aire, dependiendo de quién le dé el toque de atención".
Rosa Benito se defiende
A Rosa Benito no le han gustado mucho estas palabras, aunque hay que reconocer que Rocío Carrasco es bastante prudente cuando habla de la colaboradora. "Yo soy muchas cosas, pero veleta no", ha asegurado Rosa en Ya es mediodía. No entiende como vierte estas declaraciones sobre ella ya que siempre la ha defendido, incluso cuando nadie lo hacía. "La he defendido ante todos estos que ahora la están poniendo de maravilla, durante muchos, muchos años", ha señalado.
Rosa Benito / MEDIASET
Lo único que le parece mal de su sobrina es que no tenga contacto con sus hijos, Rocío y David. Es lo único que le ha criticado siempre. "Yo a mis hijos los defendería por encima del bien y del mal (...) Yo veleta, no, yo tengo a mis hijos que me dicen 'mamá, tranquilita'. Yo no soy la Rosa loca que entraba en todos los ruedos, yo estoy más pausada, más tranquilita".
Por este motivo, está dolida con Rocío Carrasco. "¿Ahí no era veleta? ¿Era la tita? Yo jamás he cambiado de opinión sobre Antonio David Flores Cuando iba a Sálvame yo me sentaba en una salita porque no quería coincidir con él", ha recordado.
Rosa Benito / MEDIASET
Se reitera, siempre ha estado en contra de Antonio David Flores: "No me he considera veleta en la vida, que cambie de opinión cómo ser humano sí ¿Los que han cambiado de opinión también son veletas? Con el único que no he cambiado de opinión es con Antonio David Flores”
Y a pesar de todo, le encantaría poder tener una conversación a solas con Rocío Carrasco. "Me gustaría tener una conversación contigo, hablar, decir lo que nos tengamos que decir (...) Me gustaría sentarme y que me contaras, yo si te quiero en mi vida. Yo la quiero y ella lo sabe”. Pero aún así, no da el paso de llamarla. "No hago esa llamada para que no piensen que lo hago por miedo. No le tengo miedo a nada, me da igual, no hay filtros. Lo vuelvo a decir, esto aquí y yo sí te necesito", ha sentenciado.