El lunes 4 de junio el escritor Quim Monzó tiene una cita en el Palau de la Música para recibir el Premi d'Honor de les Lletres Catalanes que le concedió Òmnium Cultural. El diario donde escribe le hace una gran entrevista a su columnista estrella donde habla sobre todo de lengua y literatura. El titular escogido por La Vanguardia es de los buenos, hace pensar "Somos trilingües: hablamos español, catanyol, y, algunos, catalán". El idioma está bien vivo para utilizarlo como una herramienta para entendernos mejor. El propio Quim Monzó utiliza en su titular una palabra inexistente en los diccionarios de catalán: catanyol. En eso consiste hablar y escribir, en comunicar. Los ayatolás del catalán hiperventilarán contra Monzó parausar una palabra incorrecta, no normativa e inventada. O no se atreverán contra el Premi d'Honor, que hace años que se afeita.
Pedro Madueño- ACN
Monzó revela que no quiso fichar por una editorial de las que pagan mucho dinero, como Planeta: "Las ofertas que he recibido eran como para retirarse y comprarse un chalet como el de Pablo Iglesias, pero yo quería que me entendieran". Y por eso no se fue de Quaderns Crema. Se declara autodidacta con respecto a la lengua catalana ya que en la escuela franquista no le enseñaron ni una palabra. Y recuerda Franco cuándo habla de política: "Eso que dicen el régimen del 78 fue un callar, Franco había nombrado a un sucesor y desde entonces se ha ido callando y tirando. Que eso sea para bien, que se vaya a la mierda este Estado, lo veo muy difícil porque tienen la fuerza". Tanta fuerza como para mantener al presidente de la entidad que le premia, Jordi Cuixart, en prisión preventiva por delitos inventados.
ACN
Monzó hace tiempo que, camino de los 70 años, es uno de los sabios a los que el país mira para tener algunas certezas. Así que el periodista de La Vanguardia le hace la pregunta ¿Cómo vive el momento político? a un independentista. Y responde de manera especialmente cuidadosa, separando Estado, entendido como el aparato político-judicial, y España: "Yo soy pesimista, pero el Estado español está quedando desnudo ante del mundo, es fascinante. Cada vez que tumban una euroorden al juez aquel... Se piensan que España es su cortijo". Maravilloso acabar con una palabra que tampoco existe en catalán, cortijo. Larga vida, Quim Monzó, a pesar de que ha vuelto a fumar.