El valenciano Rafa Mora no podía iniciar su carrera como presentador de televisión de peor manera: Haciendo el ridículo y demostrando que las únicas "cualidades" del tete de MyHyV son unos músculos muy trabajados y una mentalidad machista que da pena. Este es el currículum que le ha valido para cumplir su sueño: Emular a Jorge Javier Vázquez... o quizás a Bertín Osborne. El programa Cazamariposas, un producto de la factoría Sálvame presentado por los catalanes Nando Escribano y Núria Marín le ha fichado como relevo veraniego. Pero si pensaban que les ayudaría con el trabajo y que estaría a la altura del cargo, no han tardado ni veinte segundos en tropezarse con la cruda realidad: A Rafa Mora la responsabilidad televisiva le va muy grande.
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La jugada del programa de La Fábrica de la Tele parece temeraria, primero, y una tomadura de pelo después. No hay otra forma de explicar que un profesional de los medios no sea capaz de acabar el guion en su primer día, que llegue tarde al momento de emisión, que no domine el espacio, ni la posición de las cámaras, ni el orden del programa, etcétera. En menos de un minuto Mora ya había quedado bien retratado y abroncado por un Nando Escribano que parecía alucinar con su nuevo compañero. "Rafa, deja el guion, da igual, ya improvisaremos. En teoría deberías estar aquí conmigo para dar los titulares". El debut no ha pasado desapercibido en redes, que ven cómo este fichaje pone en peligro las grandes virtudes del programa: La falta de pretensiones y la naturalidad.
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@rafamoratete
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"Yo pensaba que el guión te lo daban para estudiarlo antes", se excusaba Mora, que ni siquiera conoce el funcionamiento del programa que tiene que presentar. Y es que el espacio de cotilleo gamberro de Divinity no tiene nada que ver con la barra libre de tonterías y falta de conocimientos sobre actualidad de la que disfruta en Sálvame. Para redondearlo, volvió a meter la pata, dando paso a una conexión que no tocaba. "Espero estar a la altura", habían sido sus primeras palabras. Seguro que Nando pensó que "de altura poca, de hartura... la que me espera". Estará deseando marcharse de vacaciones y dejar "el marrón" a otro, en este caso, a Núria Marín (que exprime su verano). Y mientras Rafa Mora hace sus pinitos, hay profesionales en abundancia que soñarían con una oportunidad como esta.