París vuelve a ser el foco de atención con Rafa Nadal como protagonista. Aunque esta vez no se trata de Roland Garros, la capital francesa reúne todas las miradas para ver a los mejores jugadores del mundo bailar sobre el tapete del Masters 1000 de París, el último gran torneo de la temporada antes del cierre de la Copa de Maestros que se disputará en Turín. Allí vuelve Rafael Nadal Parera, tras más de 40 días sin competir. Su último partido fue compartiendo el dobles con Roger Federer en la retirada del suizo en Londres y desde entonces le han pasado muchas cosas, una de ellas maravillosa: ha sido papá.
Y es que ahora Nadal está en un nuevo mundo. Dicen que ser padre te cambia la vida, y no es para menos. Lo ves todo con un prisma diferente: tu "bollito" -en este caso Rafael Nadal Jr- cobra una importancia vital en tu día a día y tu pareja, en este caso Mery Perelló, es más que nunca la niña de tus ojos. Quizás parece muy paternalista, pero es tal y como suena. El de Manacor no ha dudado en vaciarse por dentro y, tras varias semanas sin dar declaraciones sobre el tema, se ha abierto. Lo ha contado todo. ¿Cómo es como padre? ¿Cuál es la relación con su retoño? ¿Le echa mucho de menos?
Preguntado por la dureza de irse de casa sin su hijito en brazos, el balear ha explicado que "siempre ha sido duro irme de casa para jugar, sinceramente, pero ahora con mi hijo más aún", a lo que ha añadido que gracias a las videollamadas y a las nuevas tecnologías "puedo ver al pequeño todas las veces que quiera, algo que las otras generaciones no podían hacer". Eso es fenomenal, Rafa.
Su comunicación con el pequeñito
Rafa se está acostumbrando poco a poco a realizar las tareas que tiene que hacer cualquier padre primerizo (y no primerizo). Da papillas de avena para comer, ducha al bomboncito, le limpia el culete, le pone pañales... En resumen, hace de papi. Bonito, mono y morrocotudo: Rafa, aunque está en proceso de adaptación, está disfrutando de esta nueva etapa. Y obviamente le da muchos mimos al pequeñín: caricias, acurrucos, besitos y bromas. "Con él... aún no habla del todo. Casi. Después de tres semanas es difícil interactuar con un bebé", bromea Rafa. Es el mejor.
"Ya no lucho por ser el número 1"
Por si alguien tenía dudas, Rafa ya no piensa en estar en el top del ranking ATP. Esto ha quedado para otros como Carlitos Alcaraz, que lo tiene todo a favor para cerrar el 2022 como mejor jugador del mundo. Ahora, Nadal piensa en ser competitivo e ir "día a día" para poder luchar por la mayoría de títulos. El que tiene más a tiro es el de París, en el que debuta hoy mismo contra el americano Tommy Paul, un hueso duro de roer para ser una primera ronda. "Que quede una cosa clara, ya no lucho para ser número 1, solo lucho para ser competitivo en todos los eventos y ya lo logré", se sincera. Ahora está a otra cosa mariposa: debe ser un buen padre. Y es un reto mayúsculo. Lo está consiguiendo... ¡y con nota!