La actriz Renee Zellweger, mundialmente famosa por hacer de Bridget Jones en el cine, ha ido haciendo el camino de Nicole Kidman: la piel blanca, el pelo rubio y la identidad enmascarada tras una capa de bisturí, bótox y cirugía estética que le hace imposible obedecer el guion cuando pone "fruncir el ceño". A pesar de la cirugía plástica sigue recogiendo premios y ha subido en Los Ángeles como mejor actriz según el Sindicato de Actores. A sus 50 años hace un buen papel en Judy, que se estrena el 31 de enero. La cara es diferente pero conserva el instinto camaleónico:
RENEE ZELWEGER DE JOVEN:
RENEE ZELLWEGER EN 2020
Zellweger es Tom Cruise en mujer: se opera, hace papeles taquilleros, intenta parar el reloj y se le ponen los ojos chinos de tanto estirarse la piel. Empieza la temporada de premios. Los cirujanos plástico tienen un pico de trabajo.