Ricard Ustrell gritó durante su estreno los mediodías en TV3: "¡Manda el pueblo"!. Y así es: su Planta baixa se estrena con poca audiencia, un flojo 11,4% y 82 mil espectadores. Pierde comba respecto de Els matins de Lídia Heredia (15%) y pierde también su particular batalla contra el otro programa de actualidad de la franja: Al rojo vivo de La Sexta lo supera de mucho: un 16,1% en Catalunya y 153 mil espectadores. A la espera del las primeras críticas, twitter repartió las habituales bofetadas y los espectadores fueron pocos para la expectativa creada. El programa que TV3 ha cancelado para ubicar Planta baixa, el 12/14 de Carles Costa, hacía la misma audiencia a coste cero. La inversión hecha por TV3 es para liderar e hizo menos que El programa de Ana Rosa (19,8%). Tienen trabajo.
La audiencia importante es la del segundo día. El primer programa acostumbra a estar "dopado" por el efecto fisgón: los espectadores lo sintonizan por curiosidad de la novedad. Si el segundo día sube es que va bien. Siendo un programa diario se hacen los cambios sobre la marcha. Para saber si es un éxito, un fracaso o ni una cosa ni la otra habrá que esperar un par de semanas para ver el cuadro entero de audiencias. Y empezar a introducir novedades: más ritmo, menos comentaristas o cambio de tono. Ustrell se ha quedado pequeño para las expectativas y presupuesto público que le han concedido.
La buena noticia para el programa es que la curva de audiencia es ascendente: a medida que avanza PB se incorporan más espectadores. Tendrán que seducir los que están en su casa a las 12 del mediodía. De momento la audiencia es como la Planta: baja.