Algo está pasando en las entrañas de TV3. La sala de máquinas de la cadena pública está viviendo una molesta epidemia de problemas que acaban pagando los programas de su parrilla. Una especie de virus que atacó a uno de sus espacios emblemáticos hace un par de semanas, cuando el 'Està Passant' se quedaba a oscuras durante la emisión y los sistemas de realización colapsaban con insistencia. Toni Soler intentaba continuar con el programa, pero no era posible, y al cuarto de hora pedía disculpas a la audiencia, 'cerraba el chiringuito' y emplazaba a los espectadores a una emisión extraordinaria al día siguiente, viernes, cuando habitualmente descansa el equipo de Minoría Absoluta. Un contratiempo que se ha vuelto a producir durante el arranque de la gran apuesta de la cadena para esta temporada: El 'Planta Baixa' de Ricard Ustrell.
El 'pisito' de Ustrell no se quedaba a oscuras, pero sufría graves problemas de audio, que hacían prácticamente imposible seguir sus contenidos. La mesa de sonido se estropeaba en dos ocasiones, y a las 12:20 del mediodía, 30 minutos después de su inicio, su director y presentador comunicaba la decisión más drástica posible: Todos a casa. "Pedimos disculpas por las dificultades técnicas de sonido que nos han impedido continuar el Planta Baixa de hoy. Mañana más. Gracias por la confianza." La cadena también comunicaba la situación, y conectaba con la señal del 324, que ofrecía en directo el debate de política general en el Parlament de Catalunya, el tema del día. De nuevo, los problemas técnicos tumbando un programa en directo. En este caso, uno de presupuesto muy generoso, de hecho el mayor de la pública.
Habría que repasar el histórico de TV3 para comprobar si hay precedentes de este tipo: Dos programas fuera de combate en 12 días. El infortunio, en esta ocasión, ha escogido a una víctima muy delicada. Aunque todavía es muy pronto para juzgarlo con severidad, parece que el programa no arranca ni en audiencias ni en las redes sociales. Ahora, ni tan solo carburan sus 'funciones vitales' básicas. ¿Mala suerte? ¿Gafe? ¿Falta de recursos y mantenimiento? Es el misterio de la temporada.