La alegría no les ha durado ni cinco minutos. España se ha convertido en campeona del mundo de baloncesto después de una victoria inapelable por 95-75 frente a Argentina. Felicidad, abrazos, expresiones de gozo... Incluso alguna lagrimita oyendo el himno. Los comentaristas de Cuatro estaban en éxtasis. Y la maquinaria de Mediaset se ha puesto en marcha para exprimir televisivamente el hito, al más puro estilo de los programas de la casa. Entrevistas con sorpresa. Como poner en contacto vía telefónica al MVP del torneo, el catalán Ricky Rubio, con su padre. No es casual, y no solo por las grandes actuaciones del jugador NBA. Quizás buscaban la lágrima, la emoción, hurgar un poco en la tristeza de una familia que hace tres años perdió a la madre, Tona, a quién ya había dedicado el triunfo. No hacía falta, la emoción era suficientemente intensa como por habérselo pensado dos veces y respetar la intimidad de unos jugadores que, hacía solo unos minutos, lo daban todo en la cancha.

Ricky Rubio campeón del mundo de baloncesto EFE

Ni Ricky ni su padre, Esteve, parecían muy cómodos con la conexión. Quizás hubieran preferido hacerlo de forma privada. Pero como tampoco había mucha escapatoria, se enfrentaron al aprieto de la mejor manera posible. Y eso comporta expresarse como lo hacen en su casa. Seguramente ya lo entienden: En catalán. En su lengua. El resto, se lo pueden imaginar: La catalanofobia, una vez más, sacando la cabeza en redes. Ataques infectos, llenos de ignorancia, de auténtico supremacismo españolista. 

Ahora bien, afortunadamente para aquellos que todavía creen en la diversidad del estado español y la esperanza de que algún día desaparezcan los complejos de los superpatriotas de la meseta, también ha habido quien ha encontrado el momento como un motivo todavía más importante que la victoria deportiva para colgarle la medalla a Rubio.

Rubio, Gasol, Claver, campeones del Mundial de baloncesto EFE

Este es el video en cuestión:

Por si no se han dado cuenta, España ha ganado el Mundial gracias a la aportación de cinco catalanes al equipo. No hay más preguntas, señoría.