Rihanna, conocida por su estilo inigualable y su amor por la tinta, tiene más de 20 tatuajes en su cuerpo, cada uno con un significado especial. Desde su cuello hasta sus pies, la cantante ha convertido su piel en un lienzo que narra su vida y sus creencias. Pero lo que nadie esperaba era que la artista estuviera a punto de hacerse un diseño tan extravagante que, hasta su tatuador de confianza, Bang Bang, tuvo que intervenir para detenerla.
El diseño que la estrella de Barbados tenía en mente era nada menos que una guitarra rota adornada con un tanga y un sujetador colgados del mástil, una idea que incluso para los estándares de Rihanna parecía demasiado. Bang Bang, el tatuador de las celebridades, confesó en su libro de memorias Bang Bang: mi vida en tinta que tuvo que persuadir a la cantante para que lo reconsiderara. “Para que entrase en razón, le hice un dibujo con bolígrafo y le aseguré que, si en una semana aún le gustaba, le haría el tatuaje. Menos mal que desistió de la idea”, reveló.
Los tatuajes más icónicos de Rihanna y el dolor detrás de uno de ellos
A pesar de esta peculiar anécdota, Rihanna ha demostrado que la tinta no solo es decoración, sino también una forma de expresión. Entre sus tatuajes más icónicos se encuentra el diseño maorí en su mano, una obra que Bang Bang rediseñó para darle el aspecto de un tatuaje de henna. Este tatuaje, que cubre otro diseño anterior que no le convencía, es considerado el más doloroso de todos los que tiene. Otro tatuaje significativo es el de la diosa Isis bajo sus pechos, un homenaje a su abuela, quien fue un pilar fundamental en su vida. La imagen muestra a la diosa con las alas extendidas, simbolizando protección y fuerza, valores que Rihanna siempre asocia con su abuela.
La confianza de Rihanna en Bang Bang y su legado en tinta
Bang Bang no es solo un tatuador para Rihanna; es un confidente. “Cuando eres famoso, es difícil encontrar alguien en quien se pueda confiar. Pero yo confío en Bang Bang desde la primera vez que me tatuó”, escribió la cantante en el prólogo del libro del artista. No es de extrañar que él sea el responsable de la mayoría de los tatuajes que adornan el cuerpo de la cantante. El legado de Rihanna en el mundo de los tatuajes no solo radica en su estilo único, sino en cómo utiliza la tinta para contar su historia.
Aunque ha evitado un error que podría haber sido motivo de burlas, sigue siendo una inspiración para quienes ven en los tatuajes una forma de expresar su identidad. Con cada diseño, Rihanna refuerza su imagen como una artista multifacética y atrevida, capaz de convertir incluso las decisiones más arriesgadas en un relato que todos quieren escuchar. Y aunque nunca veremos la extravagante guitarra con lencería, la anécdota quedará como una prueba de que incluso las estrellas necesitan a alguien que las haga reflexionar antes de tomar decisiones definitivas.