Una de las grandes noticias del panorama audiovisual de estos días es la muerte de la productora 'La Fábrica de la Tele'. La empresa del catalán Óscar Cornejo y Adrián Madrid cierra sus puertas tras 17 años de actividad, éxito y millones de euros de facturación para un cliente exclusivo: Mediaset. La nueva dirección del grupo no era de su cuerda y han maniobrado de todas las maneras posibles hasta provocar la ruptura definitiva. 'Sálvame' era el gran transatlántico y se hundió antes de las vacaciones de verano. Y a partir de allí, el resto. Estos últimos días del año, los que recogen sus bártulos son tres espacios menores, pero legendarios al mismo tiempo: 'Socialité', con la catalana Núria Marín castigada de manera poco profesional, 'Todo es Mentira' y 'Chester'. Estos dos son productos de Risto Mejide. Y o cambian de manos... o mueren.
El 'Viajando con Chester' acabó esta serie de episodios hace una semana. Y el regusto era de temporada final, de adiós. El runrún del malestar con la casa era conocido por casi toda la plantilla. Los responsables, por descontado. Pero todo dependía de las negociaciones de una cúpula con la otra, y las posiciones cada día estaban más alejadas. Era una muerte anunciada, solo hacía falta la fecha de la defunción. Este mismo miércoles 13 de diciembre, en una entrevista en el digital 'Bluper', Cornejo y Madrid hablaban de la dura pero inexorable decisión de poner fin a la agonía, de cerrar el chiringuito. El punto final a una aventura para empezar otras. Ahora bien, también tenía un recuerdo para una masa humana importante, enorme, y que queda eclipsada por las decisiones de sus jefes: los trabajadores.
Óscar ofrecía una cifra aproximada del número de bajas que han repartido durante las últimas semanas: unas 300 personas, con sus historias de vida, problemas, alegrías y fracasos. 300 hogares en Catalunya y Madrid, donde se ubicaban las sedes de la productora. Son muchos. Ahora se están buscando las castañas nuevamente en el circuito del audiovisual, y afortunadamente muchos no tendrán demasiados problemas para volver a encontrar trabajo. Pero también hay casos de personas arraigadas al proyecto desde hace años, y que se encuentran con un panorama incierto, un poco angustiante. Una Navidad desagradable. Y diferente.
Uno de los empleados que han estado presentes durante la grabación de la última temporada de 'Chester', el catalán David Martínez (un histórico del audiovisual, por cierto), compartía dos imágenes junto a Risto Mejide y parte del equipo que ha confeccionado cada capítulo. Allí estaba el director Jordi Fusté, atado a 'La Fábrica' desde hace muchos años en diferentes proyectos. El jefe de producción de la productora, Miquel Ramells; y la jefa de producción del espacio Anna Gay, a la que algunos relacionaron erróneamente con Mejide cuando rompió con Laura Escanes. Incluso está la exreportera de 'Sálvame' Laura Lago. Los rodean más compañeros de diferentes áreas técnicas, artísticas y administrativas. Una gran familia que estos días está de luto. Suerte y aciertos a todos ellos.